Tratado de los delitos y de las penas

Capítulo 1- origen de la pena

En este primer capítulo nos habla de cómo el ser humano al unirse como sociedad cansados de le vivir en una constante guerra y de gozar una libertad que les era difícil conservarla crearon las leyes para poder gozar de ello con tranquilidad.

De dicha forma se crearía la soberanía de una nación. También era necesario defenderlo de las apropiaciones de las cosas privadas de cada hombre en

Particular. Y es así como se empezaron a crear las penas de dichos actos.

Capítulo 2- Derecho de castigar

Nos habla acerca de que todo aquello que no sea por necesidad, es tirano. Aquí nos da a entender que la necesidad fue nos obligó a dar nuestra libertad, y que es nuestro derecho es ser castigados, y todo lo que sobra se le puede considerar como abuso y no justicia.

A pesar de que se dice que es nuestro derecho ser castigados, no creo que eso funcione actualmente, porque no todo lo que hacemos, ya sea por necesidad o no, significa que merezcamos ser castigados o etiquetados como tiranos. Así que no creo que esto se llegue a cumplir.

Capítulo 3- Consecuencias

Establece 3 consecuencias de delitos, la primera consecuencia dicta que solo las leyes pueden dictaminar las penas de los delitos, esto únicamente por un legislador, ya que es la única autoridad con dicho poder, no cualquier persona lo podrá hacer, y también depende del delito cometido. La segunda consecuencia nos dice que todo individuo particular se encuentra relacionado con la sociedad, y de igual forma se liga con cada individuo particular por un contrato que obliga a las dos partes, se podría decir que existe una igualdad no importa el status social, el representante de la sociedad solo podrá formar leyes generales pero no podrá juzgar ya que habría una división por las dos partes de los involucradas es por ello que se tomara la participación de un tercero para que pueda juzgarlos bajos su criterio. Por último, la tercera consecuencia muestra que una vez que se verificará tales sanciones, se esperaría que el delito se pudiera prevenir, que al menos sirviera de algo dichas.

Yo creo que esto si se puede aplicar en la actualidad porque las mayorías de las veces en esencial que otra persona este de mediador para que el proceso sea más justo, que no cualquiera pueda dictaminar una sanción, y actualmente es lo que se utiliza, el juez es quien dicta la pena, de igual forma estas sanciones o penas nos han servido para poder prevenir los delitos.

Capítulo 4- Interpretación de las leyes

Se retoman las consecuencias, y la cuarta consecuencia enfatiza que las autoridades de las leyes penales no pueden tomar la decisión, pero si pueden influir en los jueces. También nos habla de que los jueces no reciben las leyes de manera obligada de un juramento antiguo sino más bien, como efectos de un juramento expreso, todo esto por un vínculo necesario para los intereses particulares, en pocas palabras nos dice que el juez tiene permitido o de preferencia debe hacer un silogismo para obtener la libertad o la pena, pero es muy importante comprender que no puede realizar más de un silogismo ya que podría haber incertidumbre de lo que está valorando. Lo que el juez tiene que hacer es juzgar y verificar el delito cometido con lo que esta establecido en la ley.

En la actualidad también existe esta consecuencia, aun se puede implementar esto, por el hecho que solo una persona preparada como lo es el juez, puede juzgar dependiendo lo que está establecido en la ley, los jueces siguen siendo muy objetivos ya que no les conviene dar un veredicto falso (aunque a muchos no les importa) de igual forma hay que saber entender la ley.

Capítulo 5- Oscuridad de las leyes

Habla de que existe una oscuridad en las leyes escritas que, si estas fueran entendidas por más personas, se reducirían los delitos, ya que al no conocerlas entraría el individuo en la ignorancia. Lo que también nos comenta es que si no existieran las leyes escritas la sociedad no tendría una forma de gobierno estable, todos harían lo que quisieran y es aquí donde entrarían los actos de barbarie. Otra cosa muy importante que se encuentra en el capítulo es, que del seno del lujo y de la delicadeza nacieron los tratados de los delitos y las penas. Explica un poco a con el paso del tiempo y la evolución las costumbres cambiaron y muchas de ellas se han ido eliminando, aunque no fueran consideras actos criminales, en la actualidad si, y es por eso que se quedaron en el pasado, porque las personas fueron conociendo las leyes y tomaron conciencia. Aun se logra ver un poco de esto, porque ya están escritas las leyes y ya se conocen, pero siempre hay personas que las cumplen.

Capítulo 6- Proporción entre los delitos y las penas

Deberían de existir motivos que aparten a los hombres de los delitos, que no se sientan atraídos hacia ellos. Por esto debe haber una proporción entre los delitos y las penas. Es por ello que debería haber una escala correspondiente de penas, pero para esta el legislador, que tomando en cuenta la ley, y lo que se cometió de delito, pueda llegar a una pena correspondiente. Es muy cierto que si esto llegara a suceder (tener escala correspondiente) sería más probable que se tuviera una medida o cantidad de la tiranía y libertad, pero es casi imposible.

Esto no se puede ver del todo en la actualidad porque no siempre las sanciones establecidas por el legislador no son de acorde al acto delictivo.

Capítulo 7- Errores en la graduación de las penas

Aquí explica que la verdadera medida de los delitos son los daños del hecho de la nación, y es por eso que se han cometido errores. Y para que esto no llegue a suceder, propone crear nuevas leyes para cada delito. Algo que me pareció muy cierto de este capítulo es que muchas veces las personas con la mejor intención causan un mal en la sociedad, y existen otras que son lo contrario, tienen mala intención y causan un bien, es aquí donde se podría observar el dicho de, “no hagas cosas buenas que parezcan malas.” Otros de los errores que se comenten es que en ocasiones se miden los delios por la dignidad de la persona ofendida y no por la importancia del bien de los demás. Define varios tipos de relaciones, la primera nos dice que, de la necesidad como tal nace una controversia de las pasiones y oposición de los intereses de una idea de utilidad en común. La segunda de la dependencia de un ser perfecto, en este caso se tomaría al legislador o juez. Después nos habla sobre Dios, y nos dice que si los hombres castigan cuando Dios perdona, y perdona cuando castiga, estarán contradiciendo a Dios.

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