UNASUR “EN LA HORA DE LA 2da INDEPENDENCIA”

Ministerio de Defensa

Escuela de Defensa Nacional

CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES,       de noviembre de 2012.-

TIPO DE TRABAJO: MONOGRAFÍA FINAL DE CURSO

PERSONAL PARTICIPANTE: CURSANTES DEL CURSO SUPERIOR EN DEFENSA NACIONAL

MATERIA: FUNDAMENTOS DE LA DEFENSA NACIONAL

TEMA: LA PREPARACION TERRITORIAL

DADO POR: Cnl (R) Dr Eugenio DÍAZ JAUSORO - Licenciado Adelio MÁRQUEZ

FECHA DE ENTREGA: 15 de Noviembre del 2012

UNASUR

“EN LA HORA DE LA 2da INDEPENDENCIA”

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INTRODUCCIÓN:

El móvil que guía este ensayo se encuentra en el convencimiento de que América del Sur sólo alcanzará un cierto grado de independencia en la globalización si se constituye en un estado continental industrial a saber de Methol Ferré o al menos si es capaz de profundizar los procesos de integración iniciados, siendo el más importante el de UNASUR en la actualidad.^[1] 

Si uno observa el siglo pasado, podrá observar que sólo un país en el mundo surgió como potencia (en comparación a las existentes en el siglo XIX), ese país fue Japón, y actualmente, asistimos a un mundo multipolar jerarquizado, a juicio de muchos autores, en el cual tendrán activa participación los bloques regionales de poder, comerciales o políticos.

En este sentido, la integración sudamericana más que una opción, es una necesidad,  dado la complejidad del mundo que se viene, en donde los estados continentales industriales marcaran la diferencia del resto, y en el cual, nuestro estado continental industrial, Sudamérica, posee las potencialidades necesarias para posicionarse a escala mundial, y en donde su variedad de recursos lo demuestra.

La época de adaptar políticas extranjeras, de imitar el modelo europeiforme o de someternos a los paradigmas neoliberales ha finalizado. El contexto mundial de incertidumbre e inestabilidad es propicio para mirarnos hacia dentro, la relocalización de la producción económica del mundo desarrollado al emergente ya es un hecho. Los detentores de nuestros recursos debemos ser nosotros. Las circunstancias y liderazgos de la región de los últimos años han posibilitado el paso inicial, de nosotros depende continuar en esa senda, la senda de una nueva política, más bien de una geopolítica sudamericana en serio.

El trabajo que a continuación desarrollamos se compone de tres partes, a saber: en la 1ra parte hicimos un recorrido por la región sobre los impulsos integradores, observamos el ejemplo de la Unión Europea y analizamos cómo se llegó al estado actual, en la 2da parte observamos a la UNASUR en perspectiva, su estado actual, los obstáculos y desafíos y en la 3ra parte elaboramos propuestas acerca de cómo profundizar el mismo, para finalizar con algunas conclusiones al respecto.

DESARROLLO

1ra Parte

UN RECORRIDO HISTÓRICO POR LA INTEGRACIÓN REGIONAL

Sección 1: Tras los pasos de San Martín y Bolívar. 

A lo largo de estos dos últimos siglos, es posible observar en Sudamérica, múltiples intentos de integración regional, algunos con mayor éxito que otro, pero, en la mayoría de los casos, sin que se hayan profundizado las relaciones. Han existido en ese sentido, pulsaciones integradoras y desintegradoras, es decir, tendencias fragmentadoras y otras de unificación que pueden estar asociados a múltiples factores, entre los que encontramos a la economía, a la cultura, a la idea de una identidad común, o a la política, por ejemplo, respecto de la dependencia a las principales potencias mundiales, como se vivió en algún momento del Siglo XX.

Muchas veces, se dice que hay momentos en que la economía desintegra y la política integra, y otras en que se da a viceversa. El ejemplo más exitoso de un modelo de integración entre estados lo tenemos en la Unión Europea, ya que en sus inicios, allá por el año 1957, al crearse la Comunidad Económica del Carbón y del Acero (CECA), buscaron  principalmente dejar de lado el terrible flagelo que habían ocasionado las guerras mundiales durante el Siglo XX e iniciar juntos un período de desarrollo de sus pueblos.  

Estos ciclos, o mecanismos integradores, se pueden comprender desde la lógica del interés predominante en cada actor, ya que el interés común o el individual condicionan normalmente las decisiones de los estados al relacionarse con sus vecinos. La idea de integrarse con otro estado, responde a varias causas, que van desde el plano económico al plano militar, pero la naturaleza de la integración, se da por la posibilidad, que este esquema brinda, de maximizar el bienestar colectivo de las sociedades, hacia allí, apuntan entonces los gobiernos cuando encaran estos procesos.  

Visualizando la historia de Sudamérica, es posible establecer cierto itinerario de la idea unificadora en la región. Ideas, que en los inicios del Siglo XIX, tenían quizás como elemento integrador entre los países a un objetivo común, la libertad de los pueblos, y su independencia. Existirían varios intentos en los años siguientes buscando materializar la idea de una “Patria Grande”, o la de una “América del Sur unida”, pero la historia diría que cada país iniciaría su camino de realización en forma independiente.

Finalizando el siglo pasado, y luego de ser participes de los enormes cambios ocurridos en el orden internacional, resurgen las voces que llaman a la unidad. Estas nuevas pulsaciones integradoras vienen de la mano de la economía, de la búsqueda común hacia el tan ansiado desarrollo. Pero también en casos como Argentina y Brasil, e inclusive Argentina y Chile, tuvieron un condimento político estratégico al desatar los nudos conflictivos existentes en gran parte del Siglo XX.

A continuación, se expone un pequeño cuadro sobre las pulsaciones integradoras o desintegradoras en la región a lo largo de los últimos 200 años.

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