Viviane Forrester empieza por hablarnos de los miles de destinos que han sido destruidos por el sistema económico actual, del destino de los pobres y también nos habla de los excluidos de la sociedad.

EL HORROR ECONÓMICO POR VIVIANE FORRESTER

Este libro como su propio nombre lo dice trata del horror económico.

Viviane Forrester empieza por hablarnos de los miles de destinos que han sido destruidos por el sistema económico actual, del destino de los pobres y también nos habla de los excluidos de la sociedad.

La autora nos explica lo que es el desempleo, porqué existe y cuáles son las soluciones para enfrentarlo. En los primeros capítulos Viviane nos dice que la gran mayoría de los seres humanos están encerrados en un modelo que ya no existe: el mercado del trabajo. La población no se da cuenta de la casi inexistencia del trabajo, está ciega por culpa de los pocos ricos, quienes manipulan a las personas. Viviane Forrester define al trabajo como un mito, como algo que ya no existe más, pero al cual la gente se aferra.

Esto sucede debido a que la actividad laboral es lo que le da solidez a una civilización y es vital. Hoy en día para ganarnos el derecho de vivir es necesario tener un empleo ya que es una de las muy pocas maneras que tenemos para demostrar nuestra utilidad y es por eso nos aferramos tanto a ella, cuando inconscientemente sabemos que ya no existe y que en poco tiempo desaparecerá por completo.

Viviane Forrester dice: en la actualidad alguien útil es alguien que es rentable, “empleable” o mejor dicho explotable. Pero, cuando no hay trabajo no nos es posible demostrar esa utilidad y entonces a pesar del grave desempleo que se vive hoy en día nos hacen sentir culpables de ello, nos hacen sentir vergüenza y somos inmediatamente excluidos de la sociedad.  

Cada día hay más gente en estado de pobreza y todos tenemos consciencia de esto, pero los poderosos de este mundo son muy inteligentes y buscan pintarnos un mundo color de rosa y fingen estar trabajando en la solución.

Los políticos y los gobiernos de nuestra época toman decisiones a favor de las empresas y buscan favorecer más el ámbito económico que el social dejando a un lado la ética y los sentimientos sin importarles nada. Aparentemente hacen algo en cuanto al “trabajo” y para remediar el “desempleo” pero en realidad, fingen. El estado es un instrumento que beneficia al mundo empresarial.

Viviane Forrester llama “manipuladores de símbolos” a un número limitado de personas poderosas quienes no necesitan de los demás y por lo tanto los despiden.

Por esta razón existe el desempleo, pues no hay necesidad de mano de obra ya que en el sistema actual  las empresas no necesitan tener empleados entonces no los contratan o los despiden. Las industrias son quienes más se benefician de ayudas del estado y a su vez son quienes más despiden a empleados y en lugar de ser solidarios con sus trabajadores deciden invertir sus ganancias.

El fenómeno del desempleo está en constante aumento y está ocultado en el sentido que sigue siendo un requisito para que alguien pueda ser aceptado dentro de una comunidad, pero no existe y cada vez quitan más empleos que los que crean.

Ahora bien ¿qué es de los desempleados? ¿Cómo se sienten? ¿Cuál es su futuro? Se los trata como a unos marginales “buscadores de empleo” y ellos mismos terminan sintiéndose indignos de ser parte de la sociedad. Por eso están dispuestos a aceptar cualquier trabajo a cualquier condición (se dejan explotar en el mejor de los casos).

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