Vocación hacia la docencia.

¿Por qué es importante la vocación para ser maestro?

En la actualidad en mundo nos ofrece infinidad de caminos para escoger después de obtener nuestro título de bachilleres académicos, algunos optan por estudiar ingenierías o medicina y otros se van por el campo de la administración sin embargo, hay algunos casos en los que se escoge ser maestro pero, ¿por qué es importante la vocación para esta profesión?  

          Según la RAE la vocación es la inclinación a un estado, una profesión o una carrera; o sea que es el ser llamado a hacer algo, somos pocos los que escogemos ser docentes por vocación ya que se necesita cierto dinamismo, energía y como no, amor por lo que se ha de enseñar; como dijo Maurice Debesse “La educación no crea al hombre, le ayuda a crearse a sí mismo” y es en ese proceso de creación donde los maestros pueden tener gran influencia sobre las mentes más jóvenes, no solo infundiéndoles un saber especifico sino ayudándoles a construir una percepción más amplia del mundo que los rodea pero, simultáneamente los jóvenes ayudan a enriquecer en cierta medida en conocimiento ya adquirido del docente.

        Tener vocación es tener amor hacia lo que se hace y tener vocación hacia la docencia es tener la certeza que desde las aulas se puede ayudar a la construcción de un mundo más responsable, solidario y crítico que a fin de cuentas será un mundo mejor y más humano; algunos piensan que por ser docentes solo se tiene la responsabilidad de administrar el conocimiento de un área específica pero, la responsabilidad va más allá, va en reforzar los valores éticos y morales que se adquieren desde el hogar, es hacer un pacto no escrito con el alumno en el cual se ha especificado que el docente le proporcionará una guía, un apoyo siempre que el estudiante esté dispuesto a recibirlo.

        Personalmente opino que ser maestro es, al fin de cuentas, tener una gran responsabilidad sobre nuestros hombros ya que enfrente de nosotros estarán sentados las personas que pueden ayudar  a formar un mundo mejor.

“No es mejor maestro el que sabe más, sino el que mejor enseña” (Vanceli)

-Jose Manuel Loaiza Duque.

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