Voluntariado En Europa

El voluntariado constituye un pilar importante de nuestras sociedades democráticas y pluralistas. Es una manifestación de compromiso, apoyo y participación activa en la vida social.

El voluntariado incluye todas las actividades sin fines de lucro: actividades formales, informales y no formales emprendidas a base de voluntad, elección y motivación.

El impacto en la sociedad es inmediato, ya que promueve la solidaridad entre las generaciones, contribuye al envejecimiento activo y a la participación ciudadana en todas las etapas de la vida, por lo que conlleva una verdadera inclusión social.

Los voluntarios son personas activas en los ámbitos social o educativo, en la defensa del medio ambiente o en la cooperación al desarrollo, en la acción cultural, tanto a nivel local como en misiones fuera de su país de origen.

En 2011, se acogió favorablemente la iniciativa de establecer un Año Europeo del Voluntariado con el fin de celebrar y promover el compromiso de los voluntarios y de las organizaciones que trabajan con voluntarios, así como para ayudar a responder a los retos que afrontan los voluntarios, tales como la reducción de su base de efectivos o el desplazamiento desde los compromisos a largo plazo a los compromisos específicos a corto plazo.

Tras el establecimiento del Año Europeo del Voluntariado varios países han hecho esfuerzos por aumentar el sector del voluntariado: muchos han aplicado el Manual sobre la Medición del Voluntariado de la Organización Internacional del Trabajo, alentando a otros países a hacer lo mismo con el fin de disponer de datos comparables sobre el voluntariado que proporcionen una imagen clara de su importante contribución.

El Año Europeo del Voluntariado 2011 ha establecido cuatro objetivos fundamentales:

1. Creación de un entorno que favorezca las actividades de voluntariado;

2. Mejora de las actividades voluntarias aumentando los medios a disposición de los organizadores de las mismas;

3. Reconocimiento de las actividades de voluntariado;

4. Sensibilización de la opinión pública sobre la importancia de las actividades de voluntariado.

Muchas han sido las acciones emprendidas con el fin de alcanzar los objetivos mencionados anteriormente y todas han demostrado el éxito de esta iniciativa.

La creación de un Pasaporte europeo de competencias, que ofrece un panorama completo de las competencias de los voluntarios a través de un reconocimiento oficial tanto para fines profesionales como de aprendizaje, es un claro ejemplo de ello.

Ciertamente, la crisis económica actual ha puesto en dificultades aquellas actividades que, por su naturaleza, no tienen un interés económico inmediato pero, no obstante, el éxito de las acciones llevadas a cabo ha demostrado que,

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