AGRARISMO ZAPATISTA

AGRARISMO ZAPATISTA

Para poder estudiar el zapatismo, primero debemos tomar en cuenta las culturas, costumbres, religión, ideología, etcétera, de los indios que en conjunto daremos el nombre de “etnología” y que tomaremos como referencia para analizar el surgimiento del zapatismo y sobre todo el agrarismo zapatista en el contexto de la Revolución Mexicana.

El zapatismo surgió de la lucha y organización campesina que venían desde la época de las guerras de la Independencia y de la Reforma, las cuales el porfiriato nunca pudo suprimir, lo cual le transmitió a Emiliano Zapata la intransigencia revolucionaria y encontraron un punto de apoyo para resistir durante diez años todos los combates militares de los burgueses, y se convirtió en el depositario de los títulos de propiedad de las tierras comunales que venían desde la época colonial

La Revolución está más enfocada al problema agrario y la problemática social, circunstancias que dieron origen al agrarismo revolucionario, en el cual por primera vez los grupos de indígenas lucharon por defender y reclamar sus derechos respecto de la propiedad, ya que la Revolución no sólo fue una lucha para eliminar el capitalismo sino que también tuvo un enfoque étnico.

El agrarismo zapatista puede ser comprendido de dos maneras: una que se expresa en relación con sus ideólogos y aquella que surge de la cultura regional; en cuanto a la primera, las bases de reconstrucción étnicas tomaron aspectos de reivindicación agraria  para así recuperar las tierras que les correspondían y poder tener autonomía y regirse bajo un autogobierno y por otro lado la parte jurídica en la que existen documentos que afirman los derechos que tienen los campesinos con respecto de las propiedades agrarias.  Por lo que Manuel Palafox en la Ley Agraria señaló que la repartición de tierras se llevaría a cabo de conformidad con los usos y costumbres de cada pueblo.

La ideología del agrarismo zapatista tuvo un orden progresivo ya que transitó hacia el positivismo y el liberalismo hasta llegar prácticamente al socialismo. Tenía como base de expresión y organización al Calpulli.

En noviembre de 1911 Zapata suprimió el concepto de justicia agraria e incluyó un punto en el cual dijo que se daría una ley agraria procurando mejorar la condición del trabajador; posteriormente se conocería el documento considerado como “la bandera del agrarismo mexicano”, el plan de Ayala, en el cual hay una serie de artículos en donde se manifiestan los principales contenidos agrarios  como lo son los artículos 6, 7, 8, 9, en los cuales se establecen que se tiene que acreditar la propiedad  de las tierras y que se expropiarán con la finalidad de que los pueblos obtengan ejidos, así como la nacionalización de bienes, etc. Sin embargo Neri hace la observación de que no todos los que poseen una propiedad tienen como comprobarlo ya que en muchos casos no existen títulos de propiedad sino que sólo era el hecho de que habían vivido en esa propiedad por años.

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