ALGO QUE PERDER VS YA ESTAMOS MUERTOS

ALGO QUE PERDER VS YA ESTAMOS MUERTOS

Para todo ser humano hay una gran certeza: la muerte.

¿Qué es la muerte? Alrededor del mundo podemos encontrar como cada cultura le da un significado y se relaciona de diferentes maneras con este hecho. Incluso han existido grandes pensadores que le dan connotaciones diferentes, desde aspectos religiosos hasta científicos, sin embargo y más allá de la fe, el gran encuentro entre el decir de las diversas conversaciones en la historia es la certidumbre de que moriremos y la incertidumbre de no saber que es (y que hay después).

Me atrevo a decir que la gran mayoría de los seres humanos ocurrimos condicionados con la idea de morir y con el temor de muchas veces no saber cuándo; las teorías neo-darwinistas hacen énfasis en este tema, el Homo Sapiens Sapiens ha estado en constante evolución desde sus orígenes y la carga genética ha sido heredada de generación en generación, incluyendo la ¨necesidad¨ de estar en modo supervivencia; imaginémonos siglos atrás conviviendo en bajas temperaturas con animales salvajes y sin la protección de una sociedad civilizada, la vida era dura, constantemente alerta de no ser comido por un mamut o no morir de hambre por la falta de cultivo, es decir, el status quo del ser humano era estar en supervivencia, y a pesar que han pasado miles de años, gran parte de nuestra vida ocurrimos con el mismo status quo, alertas y con el miedo del futuro, de la muerte, de la nada.

En el siglo XXI en gran parte del mundo, los seres humanos somos ¨libres¨, y vivimos en un mundo dominado en gran medida por el capitalismo, por la tanto parte de nuestra condición humana es poseer, bienes, estatus, etc., nos hemos hecho grandes recolectores de cosas, de experiencias, de personas, de maneras de ser, y nos apegamos a estas como si la vida dependiera de ello.

De ahí que en su mayoría le tenemos miedo a perder, miedo a echar a perder las relaciones, miedo a perder la estabilidad económica, miedo a perder la cordura, etc., la gran trampa de nuestros días es que las cosas (experiencias, relaciones, sentimientos…) nos usan, nos tienen.  Cuando ocurrimos desde proteger lo que podemos perder, desde el miedo, nos limitamos a expandir o crear una realidad totalmente distinta, regularmente llegamos un tope en el cual ya no estamos dispuesto a atravesar, ya que de seguir adelante podríamos perderlo todo, estar en la nada (una conversación similar a la muerte, ¿no?).

Por otra parte, cuando aceptamos que, de todas formas, nos protejamos o no, nos vamos a morir y ocurrimos desde que ya estamos muertos, la liberación aparece; cuando nos entrenamos y ocurrimos en la vida desde una plataforma de aceptación a la muerte, desde una forma más allá de lo intelectual y que se capte hasta ¨el tuétano¨, nos liberamos de las trampas de la condición humana, pues dejamos de protegernos ante lo inminente y empezamos a tomar riesgos a mostrarnos vulnerables, empezamos a jugar aceptando el final, no hay remedio, todo lo que sigue es victoria, todo lo que sigue es la celebración, la vida es celebración.

...