AUDITORIA DE ESTADO, CALIDAD EN SU PROCESO

República Bolivariana de Venezuela

Universidad Valle del Momboy

Convenio Universidad Valle del Momboy  / Iufront

Maestría Administración de Empresas

TEMÁTICA

AUDITORIA DE ESTADO, CALIDAD EN SU PROCESO

INTRODUCCIÓN

En la actualidad la Administración Pública en todos sus niveles encara un desafío esencial, todo ello debido a que las Instituciones públicas están en constantes cambios, lo cual ha obligado a revisar y reformular el papel de la gerencia en el interior de ellas, de esta manera la teoría organizacional y las perspectivas empresariales han coincidido en asignarles cada vez mayor importancia a la gerencia en la determinación de calidad y los estilos de gestión. Ante estas circunstancias, se han encaminado a alcanzar mayores niveles gerencia toma de decisiones; de manera que en su progreso, nacen nuevas acciones que se introducen para mantener unos mínimos niveles de calidad y responder a las demandas sociales con eficacia.

La Contraloría del Municipio Cárdenas del Estado Táchira, órgano  creado con la finalidad de controlar y vigilar que el manejo del Patrimonio Público del Municipio sea eficiente, transparente y que beneficie a la comunidad.

En este sentido, se plantea proponer esta investigación con el propósito de dar calidad en las Auditorías de Estado efectuadas, en búsqueda de la eficiencia a través de sus procesos, para que sean realizados con excelencia y con la calidad inducida, por un personal motivado, capacitado y calificado, que privilegie el proceso de control y logre los resultados esperados.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

El Estado se plantea un rol estratégico encaminado a alcanzar mayores niveles de eficacia, eficiencia y efectividad; de manera que al ir avanzando en el tiempo, surgen nuevas ideas o palabras que se introducen en el campo de la administración, las cuales buscan minimizar la complejidad del fenómeno empresarial. En el pasado era la organización, hace poco era la estrategia, luego la calidad, después la reingeniería, en este momento el coaching, y próximamente quién sabe cuál será el nuevo término que se importe de los países americanos  o asiáticos. Desde la época de Fayol la enseñanza de la administración se ha encaminado  a la división de las funciones dentro de la empresa, es decir, las áreas especializadas, producción, finanzas, recursos humanos, marketing y otras, hablan de un lenguaje determinado, propio de cada una; siendo esta enseñanza la base del fenómeno empresarial existente en los países latinos. De acuerdo con lo planteado por Rodríguez y Muñoz (1999), en estos tiempos actuales la Administración Pública  encara  un reto capital: “responder a las demandas sociales con eficacia, manteniendo unos mínimos niveles de calidad en un contexto de creciente servicio a la gente”; impulsando codiciosos programas de reforma y modernización administrativa, los cuales crean proyectos concretos de actuación.

En este sentido Zambrano (2001), establece que:

La planificación estratégica pública puede constituirse en la herramienta más potente para producir los cambios más profundos en la manera de diseñar y hacer gobierno en América Latina... capaz de procesar los problemas de la realidad que se desea gobernar; diseñar operaciones, trabajar con escenarios y diseño estratégico y dotar a la oficina del gobernante de sistemas de alta dirección que garantice la gerencia eficaz, eficiente y efectiva del plan del gobierno.

Es conveniente, señalar el cambio que ha surgido con el paso de los años en cuanto a numerosos aspectos que envuelven el régimen y funcionamiento de la Administración Pública, el cual se pueden resumir en tres (03) modificaciones de mayor importancia: a) los cambios políticos, entre los que destaca la implantación generalizada de sistemas democráticos, b) los cambios económicos, principalmente la austeridad en el gasto público impuesta por la crisis fiscal del Estado y c) los cambios de la forma de gestión del Sector Público, mediante la importación de técnicas desde la gestión empresarial del sector de la administración privada y la devolución de actividades hasta ahora públicas a la sociedad civil.  A éstos, según Zambrano (2001), deben añadirse los cambios tecnológicos que han revolucionado los instrumentos de gestión.  Todos estos cambios han influido sobre el funcionamiento de la Administración y sobre el comportamiento de sus propios funcionarios. De esta manera se establece la transparencia como uno de los valores esenciales en que se asienta la reforma y modernización de la Administración Pública.

En Venezuela, la Administración Pública está al servicio de los ciudadanos y ciudadanas, y fundamentada en los principios de honestidad, participación, celeridad, eficacia, eficiencia, transparencia, entre otros, tal como lo cita el artículo 141 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999).  Ahora bien, para Garay (2001), Venezuela sería un paraíso, si el artículo antes mencionado se cumpliese a cabalidad, advirtiendo que el sistema en el que se encuentra el estado es latino, “caracterizado por no ser severo con el infractor; y para evitar las infracciones y engaños de la Administración, lo que se hace es recargar a la ciudadanía con trámites y papeleo excesiva y a la vez aumente la burocracia y los impuestos para mantenerla”.

Ante esta realidad, se establece la necesidad de rescatar la política para redefinir un rumbo más vinculado a la agenda de la sociedad, a través de una política que no sea concebida para servirse a sí misma, sino vinculada al aumento de los valores, la búsqueda de oportunidades, es decir, de servir a la gente, para convertirse en una práctica capaz de responder a los problemas de los mismos y de impulsar el desarrollo, a través de una gestión de calidad que contribuya a mejorar el enfoque para alcanzar la modernización de la administración, de manera que al gestionar con criterios de excelencia se logre conseguir organizaciones, ayuntamientos o municipalidades y en general, servicios públicos que operen bajo los principios de eficiencia, economía y participación.

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