Alma

NUNCA HAY UN FINAL DEFINITIVO. SIEMPRE HAY UN COMIENZO NUEVO.

Introducción.

Seguramente cada persona en algún momento de su vida habrá pensado “este es el fin, no hay nada más que hacer” pero hemos de recordar que cada final tuvo un comienzo y que cada vez que terminamos algo necesariamente empezaremos otra etapa, esto se aplica a cada hecho por muy particular que sea, desde lo más mínimo hasta las cosas más grandes.

Nunca hay un final definitivo. Solo se cierran capítulos, pero al mismo tiempo se abren puertas, el único final irremediable sería la muerte, pero hasta la muerte es un cierre parcial y comienzo de otra etapa. En general, nuestras actitudes frente a un conflicto son independientes de la etapa de la vida en que nos encontremos; cuando pequeños, sí se ausenta nuestra madre pensamos que no volverá jamás, que nos abandonó, después de un fracaso quisieras esconderte, bajar la mirada y no querer levantarte, pensaras todo el tiempo en qué te equivocaste, porqué sucedió esto o aquello, tendrás infinitas noches de desvelo, pensando en que fue lo que hiciste mal o por que las cosas tenían que suceder de tal manera, en la adolescencia la pérdida de un amor o un amigo se traduce en el acabo mundo, en una tristeza que de no ser tratada oportunamente puede llevar a una depresión y los adultos no se escapan de reacciones extremas, ya sea, por un fracaso laboral, amoroso, etc.

Es difícil pensar en un final definitivo, es mejor imaginar, y creer, que solo se queman etapas, porque cada vez que vemos que un capítulo se cierra nos damos cuenta que hay una puerta que se abre, no existe un final total y absolutamente definitivo, en ningún orden de cosas, ya que hasta la muerte es un cierre parcial de la vida y el comienzo de otra etapa, como lo deja entrever el doctor Brian Weiss(a) en sus libros.

“Qué interesante sería escribir la historia de las experiencias en esta vida de un hombre que se suicidó en su vida anterior, cómo tropieza ahora con las mismas exigencias que se le habían presentado anteriormente, hasta que llega a comprender que debe satisfacerlas... los hechos de una vida previa pueden encauzar la vida presente.” (Lazos de amor, Brian Weiss).

Siempre hay un comienzo nuevo. Lo más lógico es que para cada final exista un nuevo comienzo, porque determinar algo y no tener esperanza, nuestra existencia no tendría sentido, siempre estamos expuestos a perderlo todo, en un segundo pueden desaparecer nuestros sueños, ilusiones, sonrisas, recuerdos y todo por lo que hemos luchado, entonces muchas veces pensamos en lo injusta que es la vida, pero no, la vida no es injusta, ya que si hemos perdido algo es porque en algún momento nos arriesgamos y comenzamos una tarea que nos traería alegrías, sueños, ilusiones y sonrisas, aun sabiendo que todo lo que comenzamos debe terminar, pero no importando cuando llegue aquel final

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