Análisis del libro el gran engaño, proyecto de reforma de pensiones y proyecto fondo de ahorro colectivo

Introducción:

El presente ensayo tiene la finalidad de analizar en qué estado se encuentra este sistema, donde la mayoría de los chilenos sienten disconformidad por los resultados y la forma de actuar que tiene el actual sistema de pensiones donde participan la mayoría de los chilenos y de forma obligatoria, donde no es considerada la opinión de las personas que aportan monetariamente de forma mensual para que este sistema pueda “funcionar”.

Esta política social señala que es primordial la existencia de una administradora de fondos, en este caso con fondos previsionales, la que busca administrar estos fondos individuales que son  “financiados a través del cobro de comisiones a sus afiliados y podrán aumentar los ahorros de estos mediante inversiones” (Biblioteca del Congreso Nacional de Chile, 2008). Esta política debe actuar de forma micro y macro social, por lo cual debería realizar un desempeño equitativo en las dos aristas nombradas anteriormente, donde claramente su accionar es aplicado con el objetivo e intereses interpersonales entre los representantes de las sociedades anónimas que se hacen cargo de la administración y beneficios del actual sistema de pensiones que fue generado en el año 1980 a través del Decreto Ley N° 3.500, “se cambió el antiguo sistema de pensiones (INP, cajas de empleados, etc.) que consistía en un fondo de ahorro común al que aportaban todos los trabajadores. Ahora hay un sistema de capitalización individual, en que cada persona tiene una cuenta individual para su pensión de vejez” (Biblioteca del Congreso Nacional de Chile, 2008).

Actualmente la sociedad chilena se encuentra en una etapa de expresar su desconformidad a través de protestas, marchas, mensajes sociales que buscan fomentar y potenciar  la participación de la ciudadanía en los temas relevantes que afectan directamente a los habitantes de este país. Por este motivo es que surgió una demanda y participación ciudadana potente, que busca modificar el actual sistema de pensiones con la finalidad de regularizar las pensiones, las cuales alcanzaban cifras negativas y que parecen una burla con respecto al alto valor de la vida en este país.

La presidenta Michelle Bachelet prontamente realiza estrategias y gestiones para poder enfrentar esta demanda social y realizar un verdadero aporte a mejorar un sistema que genera desigualdad en el bienestar de las personas. La actual jefa de Estado realiza un compromiso a mediano y largo plazo para la intervención de este sistema, donde se crea un nuevo ente regulador, un Organismo Autónomo denominado “Consejo de Ahorro Colectivo”. También involucra el proyecto de ley que consiste en modificar y perfeccionar el marco regulatorio de funcionamiento de las AFP y  un Nuevo ahorro Colectivo (5%).

Desarrollo del tema:

1- Los principios de seguridad social que tiene el actual administradora de fondos, es supuestamente aportar al bienestar de las personas en su etapa de jubilación y generalmente se da en el ciclo vital humano en la etapa de adulto mayor, por lo cual es de suma importancia constar con un ahorro que pueda asegurar mensualmente los distintos gastos económicos que pueda surgir dentro de la cotidianidad que tiene un adulto mayor en su fase de jubilación, la cual es principalmente una etapa donde el adulto mayo tiene el derecho de descansar física y psicológicamente debido a  su trayectoria como un trabajador  contribuyente, que esta propenso a adquirir enfermedades que lo puedan llevar a un lamentable fallecimiento producto del ciclo vital.

Por consiguiente, es fundamental que se entienda la importancia que tiene este sistema, donde claramente existe déficit en los objetivos principales, donde la población jubilada no ha recibido la eterna promesa sobre las condiciones y los estándares mínimos que se requiere para poder obtener un aumento en su calidad de vida, esto se debe a que los representantes de las sociedades anónimas no vinculan sus objetivos con los reales intereses que tienen, por lo cual se ve afectado directamente las personas que aportan mensualmente cotizando y entregando sus ahorros previsionales a instituciones que “a través de publicidad engañosa desarrolladas por 30 años, para ocultar que entregan bajas pensiones, unas nuestro fondo para apoderarse del país, controlando las grandes empresas, medios de comunicación  e intercambio de peligrosa influencia política” (Hormazábal Sánchez, 2011). Claramente son  otros intereses, quienes se ven especialmente beneficiados de forma económica y sobre todo en seguridad social, debido a que grupos de personas que pertenecen a las ramas políticas y por ende tienen a responder habitualmente a ejercicios y beneficios a las pocas personas que participan activamente dentro de la política y no a las personas que participan activamente en la producción económica a nivel general quienes son las personas que pertenecen a ese eterno 80%  del país que tiene menor ingreso comparado al 20% quienes viven del goce y una excelente calidad de vida.

2- En el documento de Ricardo Hormazábal aparece la definición de seguridad social, la cual nos permite visualizar una definición en contextos formales, que alude a: “la protección que la sociedad proporciona a sus miembros, mediante una serie de medidas públicas, contra las privaciones económicas y sociales que no de ser así ocasionarían la desaparición o una fuerte reducción de los ingresos por causa de enfermedad, maternidad, accidente del trabajo o enfermedad profesional, desempleo, invalidez, vejez y muerte, y también la protección en forma asistida médica y de ayuda a las familias con hijos” (Hormazábal Sánchez, 2011).

Con respecto a los principios que contiene esta visión de seguridad social, podemos detectar que existen 6 aristas que se encuentran posicionados como principios inherentes sobre seguridad social, que serán nombrados a continuación:

Universalidad: Este principio contiene las cualidades y virtudes que logra producir e intervenir esta estrategia, la cual busca “proteger a todas las personas de todos los riesgos o contingencias sociales, amparando cada uno de los estados de necesidad producidos, sin que existan discriminaciones o limitaciones a causa de la edad, raza o nacionalidad de los individuos”. (Hormazábal Sánchez, 2011, pág. 30).

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