¿Cuál es el panorama de los egresados de Educación Superior en México?

SITUACIÓN INTERNACIONAL

En la última década, el debate sobre el futuro de la educación ha sido un tema recurrente a nivel mundial, destacando la necesidad de adecuar los sistemas educativos en función de la satisfacción de las demandas de un mundo globalizado que se vuelve cada vez más difícil de predecir (ANUIES, 2000), caracterizado por la necesidad en el avance, desarrollo y uso del conocimiento, la constante revolución industrial (ANUIES, 2018) y  un crecimiento económico de régimen internacional que muestra un decremento, acompañado de la desaceleración en la creación de empleos formales (WEO, 2019) observando, en su contraparte un aumento en el ramo del empleo informal, principalmente en países emergente cómo es el caso de México (OIT, 2018) dónde la informalidad aumentó del 26% en 2010 hasta el 27% en 2017 según estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI - ENOE, 2017).

Por lo anterior, los egresados se encuentran en un entorno cada vez más exigente, dónde para incursionar en un empleo acorde a su perfil profesional, ya no es suficiente contar con título universitario que avale sus conocimientos y habilidades, sino que el entorno empresarial busca que el profesionista cumpla con las competencias relevantes que demanda el mercado laboral. Por lo que en los últimos años, las Instituciones de Educación Superior (IES) en todo el mundo han empezado a hacer énfasis en la evaluación de la calidad de sus actividades  (Rivera & Blasco, 2015).

Las primeras instituciones educativas que comenzaron a evaluar la relación entre escuela e inserción laboral mediante Estudios de Seguimiento de Egresados (ESE) estuvieron localizadas en Europa y en Estados Unidos de América. ( Briseño , Mejía , Cardoso , & Mendoza, 2014). Tal es el caso de Italia donde se destaca el proyecto Alma Laurea, formado por 51 universidades; el estudio realiza un seguimiento de la formación de los egresados, y su relación con la empleabilidad (Palloroso & García , 2019). En España, el uso de encuestas de seguimiento en las universidades ha ido en ascenso, así mismo, existen agencias de evaluación de la calidad que realizan estudios periódicos de este tipo. Entre ellas, destacan la Agencia Qualitat del sistema Universitario de Catalunya en Cataluña, o la Agencia Nacional de Evaluación de las Universidades (ANECA) (MURILLO, 2008).

Por otra parte, en Estados Unidos constituye una práctica habitual los estudios de seguimientos de egresados, al ser un requisito gubernamental para acreditar la calidad de las Instituciones de Educación Superior, siendo las Universidades las que elaboran sus propios cuestionarios. De igual forma, existen agencias que realizan este tipo de estudios, como el Nacional Center for Education Statistics, esta entidad proporciona información sobre los logros de los graduados (Palloroso & García , 2019).

De modo que, la incorporación de los Estudios de Seguimiento de Egresados en las universidades ha demostrado ser una de las estrategias fundamental para analizar el impacto de la formación ofrecida en el enfrentamiento a los problemas específicos del mercado de trabajo, y rediseñar con base a los resultados sus planes y programas de estudio.

SITUACIÓN NACIONAL

¿Cuál es el panorama de los egresados de Educación Superior en México?

Cada año se suman al mercado laboral alrededor de medio millón de jóvenes egresados, según los hallazgos del Informe “Educación Superior en México resultados y relevancia para el mercado laboral”, elaborado por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE, 2019). Siendo las licenciaturas de derecho, administración de empresas e ingería las carreas con mayor número de profesionistas (IMCO, 2018).

Pero en la última década las condiciones de trabajo han cambiado, debido al ya mencionado avance del conocimiento y aumento de la informalidad. Mostrando que para los egresados entre 25 y 34 años es difícil encontrar empleo acorde a su perfil y habilidades laborales (OCDE, 2019). De acuerdo con datos del segundo trimestre del 2019 de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), sólo el 15.6% de la población total ocupada es representada por profesionistas (INEGI, 2019), donde 6 de cada 10 empleados están vinculados con la carrera que estudiaron (COP UVM, 2018), Así mismo, la ENOE refiere que la mayor tasa de desocupación está compuesta por los egresados universitarios (INEGI, 2019).  

Al respecto el 84% de los empleadores mexicanos, señalan que la falta de congruencia entre la enseñanza de las aulas universitarias y las actividades que exige el mercado laboral es uno de los factores predominantes para dificultar la obtención de un puesto. En consecuencia, cuatro de cada cinco mencionan tener dificultades para cubrir sus vacantes (OCDE, 2019).

Cabe mencionar que para los ingenieros demandantes de empleo la perspectiva laboral se muestra un tanto distinta, de acuerdo con lo referido en el “Informe sobre la situación laboral de los graduados en ingeniería de la rama industrial 2016 y perspectivas para el 2017” realizado por el COGITI (2017), su perfil es uno de los más demandados por las empresas, dado a su flexibilidad para realizar funciones fuera de las implícitas por la licenciatura y capacidad de adaptación, teniendo mayores oportunidades laborales en comparación con otras carreras. Sin embargo, dicho perfil no está siendo desarrollado en las universidades. Según lo mencionado por el 72% de las empresas que pertenecen a dicho sector, existe un desajuste entre las habilidades que buscan los empleadores y las que tienen los egresados de ingeniería industrial, haciendo énfasis en su bajo dominio del inglés, así como en la gran contribución que actualmente tiene el manejo de un segundo idioma para una pronta inserción laboral ( Sosa , Gutiérrez , & Macías , 2018). Este último dato es reafirmado por el 70% de los egresados que participaron en la Encuesta Nacional de Egresados (ENE), donde opinan que las universidades necesitan fortalecer la enseñanza de un idioma extranjero (COP UVM, 2018).

Si bien, en México los estudios sobre egresados que enfatizan en la obtención de datos sobre la inserción de los egresados en el mercado de trabajo e indagan su opinión sobre la formación recibida (Obregón, 2003); datan en la década de 1970, donde fueron pioneras la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) unidad de Azcapotzalco, el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y las Universidades Veracruzana y Autónoma de Nuevo León fueron ( Briseño , Mejía , Cardoso , & Mendoza, 2014). Actualmente la preocupación de las Instituciones de Educación Superior, por brindar un mayor y mejor apoyo a sus estudiantes para que puedan desarrollar las competencias que necesitan en sus futuros empleos, ha aumentado. Por lo que, universidades de Guadalajara, Colima, Tlaxcala, Guanajuato, así como la Autónoma de Querétaro, la Autónoma de Tamaulipas, la Autónoma de Nuevo León y la Autónoma de Coahuila, cuentan con programas de seguimiento o vinculación con egresados ( Nigrini & Petito, 2004).

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