DERECHOS HUMANOS Y LA CONSTITUCIÓN

DERECHOS HUMANOS Y LA CONSTITUCIÓN

Los derechos humanos son considerados como necesarios y inalienables, nuestro marco jurídico contempla su respeto y cumplimiento, son muchos los políticos que no han terminado de aceptar la importancia de legislar a favor de ellos. Ya que abarcan aspectos tan diversos que es necesario una adecuada clasificación según sea la naturaleza, el origen, contenido y materia a los que se refieren.

Si bien es cierto que al paso de los años se han clasificado paulatinamente, no significa que los primeros tengan mas o menos importancia que los recientes, pues todos están enfocados en preservar la dignidad humana como principio y fin a alcanzar. Iniciaron clasificándolos en derechos humanos civiles y políticos, después en derechos económicos, sociales y culturales y más recientemente, atendiendo las situaciones relacionadas con colectividades o grupo de personas con intereses comunes.

Cabe resaltar que dentro del marco legal de los Derechos Humanos no existen niveles ni jerarquizaciones, ya que todos poseen la misma relevancia, es por esto que el estado se encuentra obligado a tratarlos en forma global . de una manera justa y equitativa por el bien de la dignidad humana.

Sabemos que no se han tenido los resultados que se hubiesen deseado, los femenicidios continúan en todo el país sin que se observe la erradicación de esta horrible práctica, existen focos que no se han apagado en cuestión a este tema, el Estado de México, Cd. Juárez y otras latitudes son referentes oscuros que lastiman a nuestra sociedad y transgreden a nuestra constitución. Las autoridades encargadas de estos asuntos se ven rebasadas desde hace décadas ya sea por negligencia y falta de preparación, tal vez sea más, por falta de adecuadas legislaciones que primeramente aseguren que un funcionario se comprometerá a cumplir sus encomiendas para salvaguardar el estado de derecho.

Las desapariciones forzadas están a la orden del día, los grupos más vulnerables son quiénes más las padecen y pareciera ser que están en completa indefención ante estos hechos. Fiscalías van y vienen, los resultados son los mismos. Se puede decir que el estado tiene el poder de acabar con estos males, pero también el poder concentrado en una sola persona o institución no es todo recomendable, recordemos que el poder enajena y corrompe a las personas y autoridades.

Temas al respecto sobran, legislaciones falta, el estado de derecho va de la mano con los derechos humanos, sin una cooperación entre ellos, tenemos asegura una estrepitosa derrota.  

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