DISCRIMINACIÓN Y VIOLENCIA CONTRA HOMOSEXUALES EN IRÁN

En múltiples ocasiones como personas hemos llegado a discriminar a otro individuo solo por el hecho de ser diferente a nosotros mismos o tener ideas que pueden llegar a discrepar. Comúnmente se ignora que en el mundo existe una gran diferencia de ideas, gustos y personalidades. Para poder entender lo anterior y manejarlo de la manera más óptima es necesario ser tolerantes y respetuosos ante las preferencias o ideas que otras personas pudiesen llegar a tener.

En tal contexto es en el que se sitúa una problemática ética realmente alarmante, la cual no debe de ser pasada por alto ya que es de suma delicadeza y de esta manera no dejar caer tal problema en lo que menciona Zugmont sobre nuestra actitud ante este tipo de situaciones que aquejan a nuestro mundo, aseverando que nuestra conciencia moral no debe quedarse satisfecha cuando cumplimos nuestra responsabilidad para nuestros seres queridos, sino cooperar de alguna manera con los problemas de nuestro mundo y no dejar todo el trabajo a las instituciones.

El problema ético en cuestión consiste en la discriminación y el mal trato a personas homosexuales. De manera global, realmente ha habido avances que permiten a tales personas desarrollar su vida de una manera óptima, pese a lo anterior, acorde con el periódico “El País” (2011) es posible destacar que más de 70 países persiguen aún a los homosexuales con todo y el apoyo de la ley. En adición a lo anterior, cabe mencionar que ocho países (todos musulmanes) penan la homosexualidad con la muerte, siendo esto establecido por la ONG pro derechos humanos Amnistía Internacional.

Para situar y delimitar tal problemática en un contexto más específico es posible mencionar, acorde con la Organización de las Naciones Unidas (2012), que en Irán el sector de la población de preferencia homosexual sufre un alto grado de violencia y discriminación. Según lo que destaca Human Rights Watch (2012), es posible hacer énfasis que en Irán existen leyes y políticas discriminatorias contra homosexuales y otras minorías sexuales que los exponen al peligro de hostigamiento, violencia e incluso muerte. Tales minorías sexuales de Irán, especialmente las que se identifican como lesbianas, gays, bisexuales o transgénero son víctimas tanto de los agentes del Estado como de particulares. Lo anterior, según tal fuente de información se debe en parte porque dichos actores saben que pueden abusar de estas personas sin consecuencia alguna.

En lo que compete a la forma en que tal problema surgió, según lo que apunta Naciones Unidas, es posible encontrar dos vertientes, la inherente a la religión que a su vez se combina con lo legal o jurídico. Acorde con Human Rights Watch, desde 1979 tras la revolución iraní, se adoptó de una manera muy estricta la ley islámica conocida como la Sharia. Según la fuente de información antes destacada es posible afirmar que las leyes

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