Discurso dia de la bandera 20 de junio de 1820 muere el Gral. Manuel Belgrano

DISCURSO ACTO DIA DE LA BANDERA

Un 20 de junio de 1820 muere el Gral. Manuel Belgrano, creador de la bandera Nacional Argentina, hombre íntegro y de talento natural, Padre de la Patria, le dedico su vida a sus sueños, es así que trabajó incansablemente por conseguir una patria libre e independiente.

Tomando los colores de la escarapela, los cuales fueron aprobados por el triunvirato, un 27 de febrero de 1812, enarbolo la bandera en las barracas del Rio Paraná, como signo de identidad y para adquirir fuerza para luchar.

En repetidas ocasiones nos preguntamos él porque del celeste y blanco, elección del Gral. Belgrano, estos son los mismos del manto de la Virgen de Lujan, Madre de Argentina, amparado bajo su protección y bendición Belgrano toma sus colores para dar identidad al pueblo Argentino. Dios por medio de la Virgen de Lujan nos regaló la dicha de identificarnos con esos colores y poder estar bajo su maternal mirada, la Virgen María es madre, no solo de Argentina, sino de toda la iglesia católica del mundo, cuando Jesús estuvo en la cruz nos entregó como hijos y a ella como nuestra madre, madre que nos enseña a ser miembros de una misma iglesia, la iglesia de Cristo y a caminar por los pasos que nos indica el mismo Jesús.

Poco más tarde un 25 de Mayo de 1812 el Gral. Belgrano hizo bendecir nuestro emblema nacional frente a su ejército, en Humahuaca en nuestra provincia.

No busco la gloria, sino la unión de los americanos, obtuvo numerosas victorias entre ellas la de los campos de Salta y Tucumán, convocando al Éxodo al Pueblo Jujeño para luchar por la independencia.

Además, junto con Sarmiento fue el padre de la Educación Argentina; en 1799 creo una escuela de náutica y otra de Geometría y dibujo; defendió la idea de que la escuela debía ser pública y gratuita para alfabetizar a toda la población, sin importar su procedencia social. En 1810, Belgrano pidió que se fundaran escuelas primarias en las ciudades, las villas y las parroquias, utilizando fondos públicos.

Siendo vocal de la primera junta funda la escuela de matemáticas. Destina su dinero no solo a la subvención de la guerra, sino a la construcción de escuelas en las provincias de Jujuy, Tarija, Tucumán y Salta, con el fin de que en ellas se les enseñase a los niños argentinos, a leer y escribir, aritméticas y la doctrina cristiana.

Entre los deberes que les lego a los maestros, sobresalen, la buena conducta, el amor al orden, el respeto a la religión, la dulzura en el trato, el desapego al interés y el estímulo a un espíritu nacional.

Como futuros docentes católicos debemos tomar cada uno de estos deberes para formar una argentina de Hombres y Mujeres que recobren nuestra identidad como nación, y juntos podamos aportar con nuestros esfuerzos, sacrificios y trabajos, a la paz y a la grandeza de la patria, bajo el amparo de nuestra Señora de Lujan, madre y patrona de la patria y de nuestro Seños Jesucristo.

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