EL COVID-19 Y LA DISCRIMINACIÓN

UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS

Universidad del Perú, Decana de América

ESCUELA DE ESTUDIOS GENERALES

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EL COVID-19 Y LA DISCRIMINACIÓN

María Alexandra Salas Casafranca

Escuela de Estudios Generales

Universidad Nacional Mayor de San Marcos

Lenguaje Académico

Lima-Perú

2021

En el marco de la emergencia sanitaria del Covid 19, nuestro país se ha visto afectado por el conjunto de crisis que este ha ocasionado en sus diversos sectores: político, salud, educación, economía y social. Esta pandemia ha evidenciado la vulnerabilidad de nuestro sistema y la facilidad con que marginamos a otros seres por alguna razón que asumimos contraria a la nuestra, lo cual ha conllevado a manifestar actos discriminatorios en esta coyuntura. Por ello, considero que los problemas de discriminación se han agravado en la crisis de la pandemia por la desinformación relacionada con el Covid-19, por las abismales diferencias económicas y el trato despreciativo a otras personas. En los siguientes párrafos, se desarrollarán los argumentos planteados a fin de defender la tesis propuesta.

La desinformación sobre el Covid-19 y cómo afecta a grupos sociales, simultáneamente la forma en la que se desarrolla a medida que la coyuntura progresiva, ocasionada por el virus, va creciendo. En referencia a artículos investigados, tener escaso conocimiento sobre el virus y sus características de contagio principales puede originar ciertos malentendidos por parte de la población o un grupo de personas, poniéndolo a detalle, no saber nada sobre el proceso de contagio y su patología hará que las personas empiecen a crear sus propias creencias e inclusive la forma en la que se propaga. Según la página investigada Noticias ONU, 16 de abril del 2020 “Noticias falsas y desinformación, otra pandemia del coronavirus” Guy Berger, director de Políticas y Estrategias sobre Comunicación e Información de la UNESCO, dice que los fundamentos para difundir desinformación son varios y comprenden motivos políticos, autopromoción y captar la atención como parte de un modelo de negocio. Las personas que lo hacen juegan con los sentimientos, temores, prejuicios y la ignorancia, garantizan aportar significado y seguridad a una realidad que es complicada, problemática y cambia rápidamente.  

La brecha económica, la cual ha sido un problema constante a lo largo de la historia de nuestro país, se ha desequilibrado en mayor medida a causa de la pandemia del Covid-19, contribuyendo, directa o indirectamente, a que la discriminación se agrave. En el contexto en el que vivimos hoy, las clases A y B han sido quienes han tenido una mayor estabilidad laboral, económica y han gozado de tener acceso al sector privado de la salud, lo que significa mayores oportunidades de conseguir oxígeno, camas UCI, medicamentos, vacunas, etc.; sucede todo lo contrario con las clases C, D y E que se han visto marginados ante la indiferencia de un estado ineficaz que ha tenido un defectuoso desempeño en su labor de asegurar que toda su población estén en igualdad de condiciones y oportunidades. Según lo que afirmó Marianne Fay, directora del Banco Mundial para Bolivia, Chile, Ecuador y Perú: “Las encuestas aplicadas por el Banco Mundial revelan que millones de niñas, niños y adolescentes peruanos se encuentran en hogares cuyos ingresos han disminuido drásticamente, sin poder acceder a servicios básicos de educación o salud, y en muchos casos sin una adecuada nutrición” (UNICEF, 2020). Esto solo comprueba que la brecha económica se ha hecho más notable a causa de las consecuencias del Covid-19, provocando que un determinado grupo que no puede acceder a las mismas comodidades que la clase privilegiada sean discriminados debido a falta de oportunidades, servicios básicos, etc. por el sector privado y por el estado.

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