EMPODERADA MUJER DEL CAMBIO

LA EMPODERADA MUJER DEL CAMBIO

Hace mucho tiempo en el año 1836, en una hacienda llamada San José de las Pampas, nació una niña a la cual le pusieron por nombre Teresa González del Real.

Ella era una niña muy inteligente que le gustaba mucho la literatura, ya que sus padres le dieron una educación basada esencialmente en la lectura de los clásicos. Ella desde muy joven se orientó a la creación literaria, interesándose fundamentalmente por las costumbres sociales y la educación.

Cuando Teresa aún no cumplía los diecisiete años se casó con un joven marino, llamado Juan Fanning García, miembro de una rica familia de Lambayeque.                                                                                                                   La pareja tuvo dos hijos a los cuales nombraron Jorge y Emma, sin embargo, Teresa pudo armonizar las labores domésticas con las intelectuales, ella continuó escribiendo artículos y narraciones que tuvieron aceptación en la sociedad.

Teresa Gonzáles y su pareja Juan Fanning, llevaban una vida bastante tranquila y armoniosa en compañía de sus dos hijos, hasta que cierto día ocurrió una tragedia.

Los peones que trabajaban en la hacienda familiar en la que ellos vivían se revelaron de manera violenta, por ese motivo la familia se vio obligada a salir de ese lugar y huir hacia la ciudad de Lima en condiciones muy penosas.

Lamentablemente durante ese viaje sus dos hijos pequeños los cuales se llamaban Jorge y Emma fallecieron. Después de esa etapa dolorosa para la pareja, decidieron luchar y seguir adelante con sus vidas, por lo que Juan Fanning continuó con su carrera militar Y Teresa se integró a la actividad cultural limeña, participando en las famosas veladas literarias dirigidas por Juana Manuela Gorriti.

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Después de un tiempo, en el año 1881 durante la guerra del Pacifico, Juan Fanning el esposo de Teresa, trabajaba como oficial de la marina, comandaba uno de los batallones más importantes para la defensa de Lima. Luchó heroicamente en la batalla de Miraflores, donde quedó gravemente herido. Lamentablemente el gran oficial falleció al siguiente día, siendo sus últimas palabras “Muero por la patria”, durante ese trágico momento Teresa organizó una colecta llamada “ofrenda patriótica de los vecinos de Lima”, por la que se recaudó 9 600 soles. En aquel tiempo se subestimaban a las mujeres, Teresa pensaba que la mujer ya estaba preparada para opinar sobre la educación y costumbres, por lo cual apostó por defender la igualdad de derechos.

Como a muchas familias de Lima, la guerra las dejó sin casa y sin recursos. Para aliviar de algún modo la soledad de su viudez, decidió fundar un colegio para señoritas en su propia casa, labor que realizó con la ayuda de sus hermanas Enriqueta y Elena.

Allí puso en práctica sus ideas sobre educación femenina e incluso escribió ella misma los textos de historia del Perú, geografía y otros. Este colegio se convirtió en el mejor de aquella época y fue preferido por varias familias de Lima.

Teresa González de Fanning dirigió este colegio por varios años. Se mantuvo al frente de su Liceo, hasta que por razones de edad y también de salud tuvo que dejarlo, sin embargo, decidió continuar con su carrera literaria.

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