ENSAYO ARTICULO 39 CPEUM

ENSAYO: ARTÍCULO 39 CONSTITUCIONAL, DE LA SOBERANÍA NACIONAL.

Creo que debemos empezar primero que nada, por saber que dice exactamente este artículo de nuestra carta magna, y es lo siguiente:

“Artículo 39. La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno.”

Y para poder analizar éste artículo de una forma más completa, podemos empezar desmembrándolo, ya que cuenta con tres partes de igual importancia, las cuales son:

La soberanía nacional reside esencial y originalmente en el pueblo

Primero creo que deberíamos empezar por determinar que se supone que es la soberanía, la RAE, la define en su segunda y tercera acepción como:

2. f. Poder político supremo que corresponde a un Estado independiente.

3. f. Alteza o excelencia no superada en cualquier orden inmaterial.

Dichas definiciones no nos aportan mucho tal vez, pero si debemos rescatar dos puntos importantes de las mismas, los cuales son: poder supremo que corresponde a un estado independiente y excelencia no superada en el orden inmaterial, lo cual pone a dicho concepto en la cúspide de los atributos que cualquier estado debe poseer, y que, a mi consideración, no puede ser sobrepasada ni mucho menos violada por nada ni por nadie.

Considero que tenemos que recordar que el uso de ésta palabra y su significado más parecido al que hoy en día buscamos que posea, fue autoría de Juan Jacobo Rosseau, el cual manifestaba que la idea del contrato social origina el concepto de soberanía del pueblo.

Rosseau afirma que dentro de cada Estado, cada individuo posee una cantidad de soberanía que es igual e inalienable que se recupera bajo la protección del Estado.

Ahora bien: la soberanía reside en el pueblo. Se han llevado a cabo muchos debates en relación a la interpretación que se le puede dar a ésta parte del artículo, y es que debemos preguntarnos algo: ¿realmente ésta la soberanía en el pueblo, en su esencia? Podría parecer que cualquier persona de forma individual y/o de forma colectiva realmente pueden hacerse valer de ésta parte de nuestra carta magna para creer que la soberanía esta fundamentalmente en nosotros, el pueblo, pero, si nos acercamos al artículo 41 de nuestra Constitución, todas esas ideas fundamentalistas y utópicas, desaparecen al darnos cuenta que se establece que el pueblo si ejerce dicha soberanía, pero a través de la institución de los tres poderes clásicos que ya todos conocemos y que es ahí donde todo empieza a transformarse en una lucha, en una competencia entre esos entes denominados partidos políticos que pareciera que están en contra justamente del pueblo que, una vez más, se supone es residente y fuente de origen de la soberanía por la cual ellos existen.

Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste

Esta segunda frase reafirma que el poder nació en nosotros, el pueblo y se ejerce para nuestro beneficio, el de todos. Si así debiera ser, entonces ¿qué pasó para que ahora el poder público se le arrebatara al pueblo y se convirtiera en un arma para mantener un esquema de riqueza y privilegios concentrados en unos cuantos? Hoy lo que vemos es una enorme desigualdad, absoluta pobreza, un gran rezago educativo y una inseguridad alarmante, en todos y cada uno de los estados y en la Federación en lo general. ¿Cómo creer que el poder público se instituye en beneficio del pueblo cuando miles de millones de pesos se desvían de programas y servicios públicos para enriquecer a funcionarios gubernamentales, proveedores del gobierno o peor aún al crimen organizado? ¿Cómo creer que el poder nace en nosotros y se instituye en nuestro beneficio si la opulencia con la que viven los gobernantes contrasta con la lacerante miseria de los gobernados? ¿Cómo creer que el poder es en nuestro beneficio si la justicia se administra discrecionalmente y mientras excluye de responsabilidad dando impunidad a los que detentan el poder, deja al pueblo, a nosotros, en estado de indefensión frente a detenciones ilegales, represión y flagrantes violaciones a los derechos humanos?

Estas preguntas a lo último que responden es a un verdadero Estado de Derecho, y por consiguiente si me lo preguntan, a lo último que responden es que existe verdadera soberanía en el mismo. Las carencias que sufre el propio pueblo en su dúa a día no deja ni entrever que la soberanía que supuestamente éste instituyo es en su propio beneficio, pareciera cómicamente (en un humor más bien negro) que persiste la Constitución de 1857, la cual decía respecto a la soberanía que:

“La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para su beneficio. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno”

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