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EVOLUCION DE LA OPINION PÚBLICA, COMUNICACIÓN POLITICA Y LA INFLUENCIA DE LOS MEDIOS DE COMUNICACION


Enviado por   •  9 de Octubre de 2013  •  6.264 Palabras (26 Páginas)  •  1.288 Visitas

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INTRODUCCION

El presente ensayo constituye una serie de ideas y puntos de vista, relacionados con los amplios y siempre relevantes temas de la comunicación y la política.

Para lo cual se ha tomado como referencia algunos autores, que han establecido conceptos diversos acerca de la temática planteada. Dichos conceptos han sido manejados para crear posteriormente realizar una aportación personal, acompañada de reflexiones, críticas y comentarios.

La primera parte de este trabajo consiste en determinar el concepto e importancia de opinión pública, y ubicar su definición por diferentes autores en distintas sociedades, y estados de tiempo. Además de hacer referencia al papel de los medios de comunicación y los efectos que causan en la relaciones y comportamiento de los individuos.

En la segunda parte se determinan los efectos de los medios de comunicación en el ámbito político y en donde se pueden identificar las diversas reacciones que se producen en los entornos electorales y en los actores que hacen parte de la vida política de una sociedad.

También se toman en cuenta antecedentes acerca de los estudios electorales realizados por investigadores que por su marcada experiencia han dado lugar a grandes aportes para posteriores estudios en la era contemporánea. 

EVOLUCION DE LA OPINION PÚBLICA, COMUNICACIÓN POLITICA Y LA INFLUENCIA DE LOS MEDIOS DE COMUNICACION

La opinión pública y la comunicación

Con el transcurrir del tiempo, los medios de comunicación se han convertido en el escenario predilecto de la política, la cual ha ejercido su poder sobre los medios y ha empleado a la opinión pública con el fin de alcanzar sus propios objetivos. En otros términos, la política significa comunicación, donde influye, persuade, se crea y se recrea la opinión pública a través de los medios de comunicación de masas.

En ese orden de ideas, desde la perspectiva teórica, la opinión pública intentó ser la expresión pública y razonada de las preocupaciones del pueblo frente a la sociedad y el poder, lo cual le permitió ocupar una posición fundamental en la sociedad como aquel organismo crítico establecedor de poder social que coartaba el actuar del Estado. No obstante, la opinión pública se sitúa también como portavoz de una minoría que preserva sus propios beneficios y dominio mediante los medios de comunicación en la sociedad de masas.

A partir de lo mencionado, se hace necesario efectuar un recorrido histórico de la opinión pública por los diferentes escenarios, recalcando sus características más significativas en épocas específicas, con la intencionalidad de establecer su rol dentro de la sociedad.

Por lo que concierne, el concepto de opinión pública se ha caracterizado por ser impreciso, difícil de determinar e incierto, en vista de que:

“El que desee comprenderlo y definirlo (el concepto de opinión pública) se dará cuenta enseguida de que está tratando con un Proteo, un ser que aparece simultáneamente con mil máscaras, tanto visible como fantasmal, impotente y sorprendentemente poderoso, que se presenta bajo innumerables formas y se nos escapa siempre entre los dedos en cuanto creemos haberlo aferrado firmemente.”

De ahí que, la dificultad teórica para la conceptualización de la opinión pública conlleva a realizar una revisión histórica, en la cual se analizan determinadas conductas colectivas y actitudes frente a quienes ejercen el poder.

Ahora bien, en la Edad Antigua la noción de opinión pública se percibe como un fenómeno al servicio de algún poderoso para mantener o derrocar su poder social. Particularmente, el diálogo en la sociedad griega se concebía como lo más preciado, donde el concepto de opinión (Doxa) y ciencia (Episteme) se constituían en vías para llegar a la verdad y la perfección. De manera que, la significación de opinión pública suscitada en la edad antigua comienza a otorgar importancia a la opinión del pueblo.

Sin embargo, en la sociedad griega:

“Se inicia así una interpretación pesimista o peyorativa de la opinión pública que llega hasta nuestra misma época, que inauguran los griegos como Platón.”

En este sentido, la opinión pública se percibe desde una visión negativa, como en el caso de la filosofía platónica, puesto que es entendida como una forma de semi – ignorancia perteneciente a lo vulgo, el cual se basa en un conocimiento incierto caracterizado por las imprecisiones que se oponen a la ciencia filosófica. Aunque, la opinión de la sociedad no carece totalmente de valor, ya que es necesario contar con sus puntos de vista para validar una determinada ley. Así, la opinión pública se convierte en una instancia con la que indispensablemente contaran los gobernantes.

Cabe señalar que, el ágora se estableció como un escenario importante para la construcción de opinión, debido a que en él se intercambiaban las diferentes posturas y se participaba en las cuestiones de interés general, facilitando el diálogo y la formación de una opinión pública que se valoraba en las decisiones de la autoridad.

En este contexto, Roma difiere de las ideas filosóficas de Grecia, en vista que se efectúa una diferencia entre opinión – ciencia y opinión – verdad. Así, la opinión pública para los romanos se entiende como apariencia, derivándose en un concepto publicista, en el que lo primordial es la imagen que proyecta alguien hacia los otros.

Sí bien entonces:

“... - es disímil la concepción entre los romanos y los griegos- se articulan en ver a la opinión pública como aquella instancia que tiene un efecto en la esfera del poder, ya sea desde el debate, como en Grecia o desde la imagen en los romanos. Esta distinción que adquirió la opinión pública va a ver opacada en la Edad Media, ya que en ésta época se disipa la distinción entre esfera pública y esfera privada, adquiriendo un enorme peso la Iglesia, que va a relegar a la Opinión pública, como poco probable.”

En consonancia con lo anterior, se puede afirmar que durante la Edad Media no es posible hablar de una opinión pública tal y como es entendida a partir de la Ilustración, debido a que la opinión pública no se suscita bajo los tres derechos esenciales, tales como expresar, discutir y disentir, es decir, la posibilidad de dialogar entre los individuos es inadmisible.

En esta dirección, el poder se constituía como un fundamento divino que procedía de Dios, donde este poder era concedido a los seres humanos por gracia divina para justificar cualquier tipo de poder y en el cual el pueblo se convierte en pasivo y obediente que no interactúa con el gobierno en la toma de decisiones.

Por consiguiente, es de tener en cuenta que la soberanía

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