El Movimiento de Okupaciones

El Movimiento de Okupaciones

El movimiento de okupaciones surge en las ciudades españolas a partir de la década de 1980, justo cuando acontece la primera crisis importante del movimiento vecinal y ciudadano que protagonizo gran parte del periodo de Transición del régimen dictatorial al democrático. No se trataba de una actualización, con retraso, del espíritu comunitarista y libertario de Mayo de 1968.

La practica de la okupacion de inmuebles abandonados constituyo, una forma de obtener espacios en los que potenciar los aspectos mas radicales de los nuevos movimientos sociales, reducidos convencionalmente al ecologismo, el pacifismo y el feminismo, pero también de otros mas marginales y alternativos como movimiento estudiantil y obrero, antifascismo, solidaridad con presos, etc. Su relevancia y trascendencia residen tanto en las características propias del movimiento como en las de sus relaciones con otros movimientos y con problemas esenciales de su contexto social.

El autor nos presenta al movimiento de okupaciones desde tres perspectivas: como un movimiento rizomático: con múltiples conexiones entre personas, ideas, acontecimientos o espacios; como un movimiento inmediatista: rechazando utopías e ideologías que proyecten a un futuro lejano la liberación de las dominaciones de poder actual; como un movimiento generador de situaciones revolucionarias y de zonas temporalmente autónomas: protestando contra la dominación capitalista con insurrecciones de “terrorismo Poético” y promoviendo el encuentro comunitario.

Estos enfoques teóricos permiten superar las simplificaciones de análisis que se concentran casi exclusivamente en : a) el carácter delictivo de la okupacion como una usurpación de una propiedad privada; b) el carácter subcultural y marginal de los activistas okupas; c) el carácter juvenil de este movimiento social.

En este articulo, se propone un análisis del movimiento okupa que, en primer lugar, distinga las lineas de persistencia y de consistencia de este conjunto de practicas urbanas interviniendo en las políticas locales y globales. En segundo lugar, se pretende explicar algunas de las contribuciones de este movimiento, como su radicalismo y su creatividad política, en función de las relaciones sociales estratégicas que lo han configurado, tanto en su seno como en relación a los contextos urbanos, políticos y sociales con los que ha interaccionado.

El autor intenta resumir su tesis de acuerdo a tres conceptos:

Contextos y mecanismos “catalizadores”: influidos por experiencias semejantes tanto de desempleo, problemas de acceso a la vivienda, desarrollo de programas culturales independientes del estado, entre otras, los jóvenes inician y expanden la okupacion por distintas ciudades.

Acontecimientos y cualidades “singulares”: la okupacion sufre una fuerte represión política, judicial y policial a partir

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