El petróleo Venezuela
Enviado por Cindy Guerra • 30 de Marzo de 2016 • Ensayo • 1.223 Palabras (5 Páginas) • 359 Visitas
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UNIVERSIDAD CENTRAL DE VENEZUELA
FACULTAD DE HUMANIDADES Y EDUCACIÓN
ESCUELA DE PSICOLOGÍA
MATERIA: TEORÍA SOCIAL
¿Cómo impactaría la falta del petróleo en la economía venezolana?
PROFESOR: Tomás Palacios ALUMNA: Guerra, Cindy C.I. 20.803.588
Avila, Mariana C.I. 19.335.235
García, Mariana C.I. 25.415.553
FECHA: 22 de Abril del 2013
MARCO TEORICO
El origen de la actividad petrolera en el mundo se inicio aproximadamente en 1859 en yacimientos encontrados en EE.UU. Luego de este descubrimiento, casi un siglo después, en Venezuela se toma interés por este recurso en el año 1911, durante la dictadura de Gómez. Para el año 1814, se perfora el primer pozo petrolero en el estado Zulia, llamado Zumaque 1, pero no es sino hasta 1917 que se exporta el primer cargamento de crudo. Sin embargo, a nivel mundial, se empezó a tomar en cuenta esta riqueza venezolana gracias al reventón del pozo Barroso 2 (edo. Zulia) en el año 1922, lo que conllevó a una competencia desenfrenada entre las compañías extranjeras por adquirir concesiones dentro del país. (España y Manzano, 2003)
La economía venezolana se ha favorecido en gran medida gracias al incremento del precio del petróleo y de los ingresos correspondientes al gobierno, estas ventas aportan el noventa por ciento del total de las exportaciones y cincuenta por ciento del ingreso fiscal.
Por otra parte, la demanda mundial cayo, no solo del petróleo, sino de todos los productos obtenidos de recursos naturales. Con un valor promedio de 18 dólares por barril en 1996, nuestra región vio el precio del crudo limitado en más de la mitad hacia finales de 1998. Estaba en proceso una crisis que en general revertiría todas las proyecciones optimistas de la economía. (Kelly y Romero, 2005).
Hay una realidad verificable y es que pese a la inestabilidad petrolera más prolongada en nuestra historia, el país muestra uno de los peores desempeños económico e institucional en América Latina y el mundo. No obstante, la economía por haber sido la más beneficiada en América Latina por los elevados precios de las materias primas y más particularmente la de los hidrocarburos, mantiene la tasa más baja de aumento promedio por habitante entre 1999 y 2012, al tiempo que registró la tasa de inflación más prominente del continente y una de las primeras en el mundo, cuadruplicando en algunos casos la incrementación de precios de distintas economías de la región como Perú, Chile y Colombia. Venezuela tiene un elevado riesgo y como resultado de esto paga tasas de interés muy elevadas en la posición de deuda pública externa, inclusive superior a la de países que enfrentan graves crisis como Grecia y España. El nivel de endeudamiento se ha sextuplicado debido a un déficit fiscal permanente. Aunque, nuestra economía exacerbó su dependencia al petróleo, a diferencia de otros países en la región que aprovecharon el auge de precios de las materias primas para atraer inversiones extranjeras y desarrollar la diversificación de sus economías. Por ende, el gobierno propició un proceso de desindustrialización y de atraso en la productividad agrícola, lo cual ha llevado a una declinación de las exportaciones distintas al petróleo y una amplificación desmedida de las importaciones. En consecuencia, se destruyeron empleos productivos privados y se extendió el empleo público, decayó la productividad total de la economía, simultáneamente con la alta tasa de inflación ocasionando un deterioro del salario real, perjudicando el bienestar de la población trabajadora. (Guerra, Levy-Carciente, Bruzco, Mencía y Oliveros, 2012).
Más específicamente, se muestra de forma alarmante el estado de la industria petrolera la cual sufre problemas graduales que han ocasionado una caída en la producción, exportaciones, ganancias y sostenibilidad financiera. La producción del producto interno bruto bajó entre 3 y 2,5 millones de barriles diarios por falta de cuidado, el despido de 18.000 empleados de PDVSA y la ausencia de inversión. PDVSA debió invertir $13.300 millones en 2010 pero no lo hizo por falta de recursos; en 2008 suspendió pagos a sus contratistas y proveedores incurriendo en una deuda de $7.000 millones en 2009. La crisis eléctrica genera constantes apagones que perjudican la producción y la población. En 2012, se cerró una de las diez refinerías más importantes del mundo, en las Islas Vírgenes, a la que PDVSA le suministraba la mitad de su PIB, ocasionado por una pérdida de $1.300 millones desde 2009. (Mesa-Lago, 2013).
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