Emilio Portes Gil (1928-1930)

Emilio Portes Gil (1928-1930).

Debido a la situación que pasaba el país, Plutarco Elías Calles designaba a Emilio Portes Gil como presidente interino en 1928. Para ese entonces, Calles se había convertido en el hombre fuerte de la política mexicana, denominándose así “El Jefe Máximo”.

Al ya estar en la presidencia, Portes Gil no disponía de una libertad absoluta, como debería tenerla cualquier otra persona en su puesto, y las limitaciones que este tuvo se debían a que Calles seguía opinando y dirigiendo muchos aspectos de la política nacional.

Una de las cualidades que se le pudieron atribuir como político regionalista fue su participación  como líder progresista en su tierra natal, Tamaulipas, donde se había destacado por su actividad a favor de campesinos y obreros. Al ya ser presidente, inicio una acción aniquiladora en contra de la CROM, logrando desmembrarla y, a su vez, ganándose a otros muchos grupos sindicales.

Su política del reparto agrario estuvo encaminada a mantener a los campesinos prestos para cualquier momento en que algunos miembros del Ejercito quisieran revelarse.

Para hacerse valer como hombre de poder, hacia ver a Calles la necesidad de repartir mas tierras con el fin de que el pueblo tuviese mas confianza en la continuidad de la revolución para mantener el control de las masas campesinas.

En el terreno político se perfilaba Aarón Sáenz como posible sucesor de Portes Gil, sin embargo, el presidente llevo a cabo una intensa campaña en su contra. En Marzo de 1929, en la celebración de la Convención Nacional del PNR, se manifestaron en favor de Sáenz 23 delegaciones de 23 estados, pero unos días después, el panorama cambio, nominándose finalmente a Pascual Ortiz Rubio.

En el aspecto religioso, Portes Gil se condujo con tacto y pudo finalmente dar término al conflicto que parecía prolongarse por mas tiempo. En Junio de 1929 el gobierno de Portes Gil suscribió un acuerdo con los representantes de la jerarquía eclesiástica para normalizar las relaciones entre la Iglesia y el Estado.

Elecciones de 1929 e imposición de Calles.

En las elecciones de 1929 participaron el candidato del PNR, Pascual Ortiz Rubio y su oponente José Vasconcelos, quien se manifestó en abierto desacuerdo con la política seguida por Calles. Durante la contienda electoral se manifestaron sus diferencias políticas.

Ortiz Rubio, a diferencia de Vasconcelos, contaba con el apoyo oficial. El Partido Nacional Revolucionario era su postulante y el Jefe Máximo estaba tras el candidato. Ortiz Rubio contaba con el apoyo de Calles, hecho que no lo podría hacer perder y tener el triunfo asegurado.

Pascual Ortiz Rubio (1930-1932).

Ortiz Rubio, al llegar a la presidencia, se vio muy comprometido con Calles. Este ultimo continuaba opinando sobre asuntos de carácter político y económico, incluso, llego a imponer la mayoría del gabinete de la administración de Ortiz Rubio. Mucho poder estaba en manos del “Jefe Máximo”, que en frecuentes ocasiones, los miembros del gabinete presidencial recurrían ante él para que les marcara los lineamientos políticos a seguir.

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