Ensayo: Comportamiento organizacional.

ENSAYO INDIVIDUAL

El presente ensayo resume de manera concisa una noticia presentada por el diario Gestión el día 10 de noviembre del 2015: LOS EQUIPOS MÁS EFICIENTES NO RESPONDEN AL “ORDENO Y MANDO”, la cual se encuentra vinculada con el tema de “grupo y equipo de trabajo”, además de cómo poder construir equipos de alto desempeño en las organizaciones de trabajo. Asimismo, se realizará un análisis partiendo de la teoría adquirida relacionada al trabajo en equipo dentro de una organización y cómo este incrementa su desempeño. Por último, se brindará un aporte personal sobre la utilidad del presente tema para una organización.

La noticia sustenta que cualquier profesional responde mejor a directrices claras y refuerzos positivos que a las órdenes carentes de explicación, es decir, hacer partícipe al equipo hace más productivo el trabajo. Richard Branson, fundador de Virgin Group, manifiesta que la motivación y el refuerzo positivo es la fórmula de liderazgo más efectiva que puede fomentar un gerente, ya que fomentan mejor el trabajo en equipo que el “ordeno y mando”. Todos los gerentes también desempeñan un rol de líder. Esto incluye contratar, capacitar, motivar y disciplinar empleados. “Cuando las personas de alto nivel ofrecen visiones nuevas, en especial cuando estas contienen metas distantes o vagas, es difícil que los trabajadores las acepten así como tampoco los cambios que implican. Al despertar emociones y vincularlas con una visión atractiva, los líderes incrementan la probabilidad de que gerentes y empleados por igual acepten el cambio” (Robbins: 2009). Por otro lado, Paco Muro, presidente de Otto Walter International, considera que se puede ejercer la autoridad con motivación positiva pero para eso se necesita una alta calidad de dirección de personas. Sin embargo, el “ordeno y mando” sigue siendo un estilo muy utilizado dentro de las organizaciones a pesar que se ha demostrado que es la forma más improductiva, ya que, según Genoveva Vera, experta en liderazgo, existen muchas personas las cuales requieren de órdenes.

Este aspecto de motivación se encuentra muy relacionado con lo que afirma Robbins, en el cual alude a dos estudios que resaltan la importancia que tienen los estados de ánimo y las emociones sobre la motivación. Uno de ellos reveló que si a la gente se le da retroalimentación acerca de su desempeño, se influía en su estado de ánimo, lo que a su vez tenia influencia en su motivación y podían trabajan armoniosamente en equipo. Es decir, existe un ciclo en el que el buen humor hace que la gente sea más creativa, lo que genera retroalimentación positiva de parte de quienes observan su trabajo y que refuerza más su humor positivo, es decir, que sean más tolerantes unos a otros, lo cual fomentaría un mejoramiento en el clima laboral. Por lo tanto, las organizaciones que promueven los estados de ánimo positivos en el trabajo seguramente tendrán una fuerza laboral más motivada (Robbins: 2009)

Así pues, se puede decir que la motivación que un gerente le brinda a los miembros de una organización tiene muchas más ventajas: mayor desarrollo del potencial de los empleados, lo que se traduce en mayor eficacia en su trabajo; aumento de la confianza del colaborador hacia su organización, generando mayor compromiso y lealtad del trabajador hacia su empresa; mejora del clima laboral, lo que genera una mayor cooperación e intercambio de conocimientos entre los miembros de un equipo; mejora de los niveles de estrés, que se traduce en menor absentismo y bajas laborales; y cambio de actitudes. Sin embargo, en entornos decrecientes es mucho más difícil mantener la motivación, ya que no se vive rodeado de éxitos sino de recortes, de salidas de compañeros, de pérdida de ventas, etcétera. Y eso no ayuda a crear un buen ambiente.

Actualmente, las nuevas generaciones de profesionales no toleran el “ordeno y mando”, menos aun cuando esta fórmula incita al miedo, hace que la conducta esté dirigida a evadir al castigo y deja al profesional en estado de alerta, es decir, la persona se enfoca únicamente en eludir las represalias mas no en desarrollar y explotar sus habilidades dentro de la organización. Las nuevas generaciones llegan con una actitud de “igual a igual” con la compañía, es decir, se le contrata al profesional por su trabajo y este lo brinda mientras se sienta a gusto: el empleo es un acuerdo entre dos partes en el que ambas deben estar satisfechas.

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