Estratificación y movilidad social

Estratificación y movilidad social.

La estratificación social es la forma en que la sociedad se agrupa en estratos sociales reconocibles de acuerdo a diferentes criterios de categorización. Se tiene en cuenta la conformación de grupos de acuerdo a criterios establecidos y reconocidos, como ser la ocupación e ingreso, riqueza y estatus, poder social, económico o político.

El estudio “Clases Medias en México” publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revela que en México de los que el 59.13% de los horagares son de clase baja. En ellos viven prácticamente tres de cada 5 mexicanos, según el estudio. En la clase media tenemos que el 39.16% de los hogares en México son de clase, y en el otro extremo de los estratos sociales tenemos que solo el 1.7% es perteneciente a la llamada clase alta.

La movilidad social o movilidad socioeconómica es el conjunto de movimientos o desplazamientos que efectúan los individuos, las familias o los grupos sociales dentro de un determinado sistema socioeconómico. 

En cuanto al tema de la movilidad social primero debemos de saber que es un quintil. El quintil de ingreso se calcula ordenando la población (de una región, país, etc.) desde el individuo más pobre al más adinerado, para luego dividirla en 5 partes de igual número de individuos; con esto se obtienen 5 quintiles ordenados por sus ingresos, donde el primer quintil (o Q1, I quintil) representa la porción de la población más pobre; el segundo quintil (Q2, II quintil), el siguiente nivel y así sucesivamente hasta el quinto quintil (Q5, V quintil), representante de la población más rica.

A continuación se presenta un tabla de resultados de una encuesta hecha por la Fundación Espinosa Rugarcía, a través del Centro de Estudios Espinosa Yglesias, quien coordinó el proyecto, y Consulta Mitofsky para entender más acerca de la movilidad social de nuestro país.

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De esta tabla podemos resaltar los siguientes resultados:

• Casi la mitad de los mexicanos (48%), cuyos padres pertenecían al 20% más pobre de la población (quintil 1), permanecen en ese mismo quintil. Además, casi tres cuartas partes de ellos se ubican en los dos quintiles de ingresos más bajos (el 40% más pobre de la población). Tan sólo 26% de este grupo logró ubicarse en los tres quintiles superiores de ingreso, y sólo 4 de cada 100 alcanzaron el quintil de ingreso más alto, lo cual refleja la poca oportunidad de la población más pobre de aspirar a mejorar su nivel de ingreso con el paso del tiempo.
• En el extremo contrario de la tabla vemos un resultado que confirma la poca movilidad social en nuestro país: Casi seis de cada diez personas cuyos padres pertenecían al 20% más rico de la población permanecen en ese quintil y el 85% de ese grupo se encuentran actualmente en los dos quintiles de ingreso más alto. Resalta también que ningún miembro de ese grupo se ubica ahora en el quintil de ingreso más bajo.
• Los dos resultados anteriores revelan que en los extremos de la distribución de ingreso en México hay muy poca movilidad social. Esto quiere decir que la pobreza y la riqueza en nuestro país casi se heredan. Los hijos de padres ricos tienen una fuerte probabilidad de ser ricos en su vida adulta, y los hijos de padres pobres tienen una alta probabilidad de ser pobres en su vida adulta. Hay pocas probabilidades de que la población de menores ingresos suba en la escala socioeconómica del país.
• En todos los casos se observó que el salto en tres o más quintiles es muy raro. El más alto fue el 7% de las personas que ahora se ubican en el cuarto quintil y cuyos padres se ubicaban en el quintil 1, mientras que el más bajo fue el 0% de personas que se ubican en el quintil 1 y cuyos padres se ubicaban en el quintil 5.
• La movilidad es mucho más dinámica entre los quintiles intermedios de ingreso. Sólo el 28% de las personas cuyos padres se ubicaban en el quintil 2 permanecen en ese quintil, el 26% de aquellos cuyos padres se ubicaban en el quintil 3 se mantienen en el mismo, y el 29% de quienes sus padres se ubicaban en el quintil 4, permanecen en el mismo quintil de ingreso. Estos porcentajes contrastan con el 48% y el 59% de aquellos cuyos padres se ubicaban en los quintiles 1 y 5, respectivamente.
• A pesar de que en los dos extremos de la distribución de ingreso la movilidad es muy poca, resultó ser menos probable que alguien rico en su edad temprana deje de serlo en su edad adulta, que el que alguien pobre al inicio de su vida deje de serlo más adelante. Esto no significa que hay buenas posibilidades de dejar de ser pobre, sino que la población rica tiene casi garantizado permanecer en esa posición social. El origen socioeconómico demostró ser muy importante para determinar el destino de la persona.

Así, se encontró que la movilidad social es muy poca en México, particularmente en los extremos de la distribución de ingreso. Hay que recordar que esta movilidad se entiende con relación al resto de la población, es decir, decimos que hay movilidad social cuando un considerable número de personas logra subir o bajar (superar a otros o quedar detrás de otros) en la escala económica del país. Esto no implica que no pueda aumentar el ingreso generalizado de la población sin que esto se traduzca en modificaciones en el acomodo de la gente en la escala de ingresos.

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