Festejos Populares En La Boca
Enviado por Sucutrule • 24 de Abril de 2014 • 509 Palabras (3 Páginas) • 229 Visitas
Boca Juniors cumplirá los cincuenta años con el titulo de campeón en su poder. Feliz coincidencia de una victoria que devuelve a la poderosa institución la intensa alegría que desde hace diez años andaba buscando.
Todos los campeonatos tienen el mismo significado y todos los campeones adquieren la misma jerarquía de triunfadores dentro del deporte, pero la verdad es que para festejar estos triunfos Boca es un caso único. La mayoría, la generalidad, gana el certamen mayor de nuestro futbol y se alegra, claro, hay escenas de júbilo, banquetes y premios pero todo ello dentro de los límites casi diríamos “reglamentarios”. El acontecimiento perdura para el núcleo de los hinchas más apasionados, de esos que aprovecharan el triunfo de sus colores para engalanarse por dentro y por fuera --orgullo en los ojos, profusión de fotos en el dormitorio – y para gritárselo a los hinchas de los otros cuadros (cuanto más amigos, mejor). Pero de ahí no pasa, por lo general. En cambio, cuando se trata de Boca ocurre que la conquista del campeonato es un rico motivo, un regio pretexto que está aguardando el barrio entero para hacer la gran fiesta. En esa algarabía ensordecedora, en esa profusión de banderas y estandartes, en los estribillos de las canciones y en el fragor de los brindis hay una conmovedora demostración de cariño, de intimidad familiar. Es un carnaval, si, un carnaval en lo que tiene de diversión y colorido, sin desbordes canallescos y sin carcajadas histéricas. Es la explosión de la felicidad que trae la riqueza llegada de pronto a la mesa de los pobres. Es ese júbilo que brota, incontenible, del alma iluminada, acelera el corazón, corre por las venas y busca la libertad del aire en el grito y en la carcajada, en el agitar de los brazos y el bailoteo incesante de una danza improvisada. No son los hinchas de Boca los que están festejando un triunfo. Es Boca mismo. No es que ellos sean de Boca. Boca es de ellos, “es” ellos. Por eso dijimos alguna vez que, más que un cuadro de fútbol, más que un club, Boca es un estado de ánimo de la multitud. Y los hinchas nuestros están divididos en boquenses y antiboquenses, lo que quiere decir que Boca no le es indiferente a nadie. Será por el ruido que meten sus legiones de simpatizantes, por la facilidad con que se grita el nombre de dos silabas, por la eufonía de las dos vocales básicas, o por el recuerdo de sus campañas pasadas, o por los nombres de los muchos cracks que desfilaron por sus filas, o por los colores de su divisa, o por la histórica jira por Europa, o por un poco de todo eso y por algún otro factor más que se nos escapa, pero lo cierto es que Boca-barrio, Boca-equipo, Boca-hincha es todo una sola cosa, un solo cuerpo de juventud desbordante, una sola alma que vibra con alegrías infantiles y ofrece al visitante el espectáculo espléndido de ver a una gran familia en día de fiesta.
...