Funciones Deslegitimadoras Del Derecho Penal

FUNCIONES DESLEGITIMADORAS

Desde un práctico punto de vista, el derecho penal realiza una serie de funciones que son raramente discutidos hoy en día y que, en lugar de confirmar su legitimidad, servirá para socavar la misma.

Esto es cierto en la medida en que estas funciones están enfocadas a interiorizar valores éticos e inculcar sentimientos de seguridad a través de la simple aplicación de las leyes penales.

INTERIORIZACIÓN DE VALORES

En un estado democrático, el derecho penal se encargará solamente de asignar la gravedad de los crímenes a la conducta que tiene el potencial de dañar o poner en peligro los derechos de los demás.

Como un resultado, el derecho penal no puede intervenir en simples  infracciones que no resultan en una vulneración de los derechos, ya que puede solamente hacer así que cuando la vulneración o poner los propios derechos en peligro realmente ocurre.

.Para poner es otra manera, la ley penal no puede imponer un código de sus ciudadanos debido a que tienen ética autónoma como un resultado de su libertad para desarrollar sus personalidades libremente y sin  limitaciones  más de los que son impuestas por los derechos de los demás  y por el sistema legal.

La ley penal existe exclusivamente a proteger los derechos de las personas inocentes y al hacerlo así, en tal una forma que ellos no estén expuestos a la delincuencia o castigo. Para poner es otra manera, esta no puede intervenir en la psicológica interioridad de cada uno de los ciudadanos en orden a dar forma a una visión del mundo que es coherente con el estado de  intereses.

Se puede solamente afectar a la forma en que actúa en el exterior, no la forma en que actúa en el interior. Esta injerencia no está permitida, al menos si el objetivo es hacer cumplir una ley penal democrática.

Sin embargo, un problema es que no hay ningún fundamento para imputar esta función de la  ley penal, a pesar del hecho de que ella existe en la realidad, y que el castigo de la conducta trae consigo como resultado repercusiones  sociales y morales. Es decir, el derecho penal tiene un efecto interno sobre los ciudadanos ya que crea juicios morales, en contra el comportamiento de los demás.

FUNCIÓN SIMBÓLICA

La función de la ley penal no puede ser entendida únicamente como la prevención de delitos y sanciones informales y como el aseguramiento de las garantías de que el delincuente recibe, ya que también sirve otro propósito, independientemente de la eficacia o ineficacia de esas funciones. Esto se debe a que una sola aplicación del derecho penal tiene el potencial de crear la impresión de que se está utilizando el poder político para satisfacer las demandas sociales de enjuiciamiento penal .Para poner esto de otra manera, el mero acto de hacer cumplir las normas penales genera las ideas, determina las creencias y comportamientos, crea la percepción de que el poder se ejerce para el beneficio de la sociedad, y fomenta la fe en su legitimidad.

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