Hundimiento Del Titanic

El hundimiento del Titanic

Había tomado 3.000 trabajadores dos años para construir el Titanic. En ese momento, en 1911, era el barco más grande y más seguro del mundo. Hay eran películas sobre él, periódicos escribieron sobre él, y la gente de todo el mundo hablaba de esta maravillosa nave.

El 10 de abril 1912 el Titanic partió de Southampton, Inglaterra, a navegar a Nueva York. Era su primer viaje y que iba a tener siete días. Muchos ricos habían pagado mucho dinero para viajar en primera clase. Algunos de ellos eran millonarios famosos. La nave también transportaba inmigrantes pobres de Irlanda, que iban a los Estados Unidos con la esperanza de una vida mejor. En esa época del año, el Atlántico Norte solía ser peligroso debido a los numerosos icebergs. Otros buques de la zona habían advertido capitán Smith acerca de esto, pero él continuó navegando tan rápido como pudo. De pronto, en la noche del 14 de abril, el Titanic chocó contra un iceberg. Ocurrió a las 11:40 de la noche, y la mayoría de los pasajeros estaban dormidos.

Cuando el capitán Smith vio el agujero en el lado de la nave, él sabía que el titanic se perdió. Se fue a la sala de radio y envió un SOS llamar. Había otras naves en esa zona, pero no podían creer que el titanic estaba hundiendo. Habían visto las llamaradas procedentes de la dirección de la nave, pero que pensaban las personas a bordo estaban celebrando. Smith dijo a sus hombres para obtener los pasajeros en los botes salvavidas. Primero fue la mujer y los niños. Pero lo peor estaba aún por llegar. No había suficientes botes salvavidas para todos. De las 2.228 personas a bordo, 1.500 tuvieron que quedarse atrás.

Hay muchas historias sobre esos trágicos últimos minutos en el Titanic. Un millonario y su joven esposa trataron de conseguir un barco, pero no había espacio suficiente para los dos. Así que le dijo que se fuera y él se quedó atrás. Por otro barco, había lugar para la señora Strauss, pero no para su marido. Ella no quería solo y decidió quedarse y morir con él.

En esa noche, hubo muchos héroes, pero la gente nunca olvidará los músicos. La banda siguió tocando mientras el barco se hundía. El capitán Smith no abandonó tampoco, y bajó con ella al fondo del océano.

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