Incertidumbre y falta de diálogo educacional

Referencia: R. Evangelista. (8 de septiembre del 2020). Incertidumbre y falta de diálogo educacional. La Tercera.

 Recuperado de: https://www.latercera.com/opinion/noticia/incertidumbre-y-falta-de-dialogo-educacional/TZDNYRPK6NCJ7JB7LYBGIST27U/

Incertidumbre y falta de diálogo educacional. (Título)

A pesar de todos los esfuerzos que hemos hecho para continuar el aprendizaje desde nuestras casas, resulta bien evidente que todos queremos que nuestros niños, niñas y adolescentes vuelvan a clases presenciales cuando estén las condiciones sanitarias necesarias para hacerlo. (Tesis)

Pero lo que no es evidente, es cuáles son esas “condiciones sanitarias”. La discusión pública que se ha dado en Chile se ha centrado en un confronta miento entre las distintas posturas cuando en realidad lo que debemos propiciar es un diálogo abierto para que las comunidades educativas vayan tomando decisiones locales dependiendo de su realidad particular.

Lo que sentimos hoy, es incertidumbre y miedo. Son esos sentimientos los que mueven nuestras decisiones y si los seguimos la conclusión inmediata es que solo queda continuar con una educación de emergencia y esperar que haya vacuna. Pero creo que somos capaces de ver más allá, comenzando por valorizar lo que hemos hecho y sacando lecciones de lo aprendido. Una primera razón en este párrafo es que afirma que solo hay que esperar que haya una vacuna para que los alumnos entren a clases. Una falacia que se puede identificar es que generaliza que todos sentimos incertidumbre y miedo y no da conocer evidencia de quienes lo siente, por lo tanto es una falsa analogía porque el mismo lo dice y lo afirma.

En el mundo hay más de 1.000 millones de niños, niñas y adolescentes sin clases presenciales; líderes, académicos y autoridades del mundo entero han anticipado el daño que esto traerá.  En Chile, son millones los que continúan sus aprendizajes en aulas virtuales, que son preparadas con mucho esfuerzo por miles de profesores que, por lo demás, han tenido resultados positivos demostrándonos que somos creativos y capaces de adaptarnos ante tan difícil realidad. Debemos valorar el trabajo que se ha hecho en miles de establecimientos del país y evitar decir que este va a ser un año perdido. Una de las primeras razones que se presenta es que las clases virtuales han demostrado que tienen resultado positivo y una segunda razón es que dice que hemos sido capaces de adaptarnos y que este no será un año perdido. Una de las evidencias es que en chile son millones los que están con clases online, pero sin embargo sus razones muestran falacias ya que no todos han podido adaptarse y son capaces de clases online, falta evidencia de los resultados positivos que dice de donde lo obtuvo. Entonces nos volvemos a encontrar con una falsa analogía por que solo muestra que la adaptación positiva la dijo el autor.

Además, hemos entendido en la práctica que el aprendizaje no se realiza sólo dentro de las cuatro paredes del aula. Hemos visto cómo los estudiantes aprenden a pesar de las dificultades que tienen en sus casas y las familias se comprometen con el aprendizaje de los niños a pesar del poco tiempo o la falta de conectividad. En este párrafo una de las razones que presenta es que el aprendizaje no se realiza solo dentro del aula, la cual es completamente asertiva. Pero causa una interrogante ¿Los alumnos aprenden de manera efectiva en la casa? Con esta interrogante que nos hacemos podemos apreciar una falacia Ad Baculum.

Pero también hemos constatado, que hay muchos estudiantes que necesitan algo más que las clases virtuales porque no logran el vínculo emocional necesario ni los resultados de aprendizaje adecuados a su etapa de desarrollo. En este párrafo existe una contradicción de una de sus razones planteadas en el párrafo de arriba ya que dice que no se logran los aprendizajes adecuados a su etapa y arriba afirma que las clases online han sido de manera positiva en el aprendizaje. Por lo que es un falso dilema y econtramos la falacia Ad autoritatem.

En nuestro país hay 346 comunas, de las cuáles 137 están hoy sin casos activos de Covid-19, 27 con tasa de incidencia menor a 100 e incluso 15 que nunca han tenido un caso (datos MINSAL al 24-8-20). Por lo tanto, existe un espacio para conversar como en algunos lugares específicos de Chile, podemos retomar las clases presenciales. Es una oportunidad innegable para ser descentralizados en nuestro actuar y no solo esperar medidas específicas centralizadas. Se da a conocer evidencia, con datos correspondientes a los contagios dado por el MINSAL. Y dada esta evidencia es donde se puede dar a conocer una de las razones para volver a clases en lugares que no tienen casos activos.

Estamos frente a la pandemia educativa más relevante en la historia de la educación moderna y no existen recetas infalibles. La forma de disminuir nuestro miedo o la incertidumbre que tenemos ante esta decisión es conversando. Mientras continúe existiendo una falta de diálogo entre todos los actores involucrados para discutir cómo, cuándo y en qué condiciones particulares de cada comunidad educativa, debemos empezar a retomar las clases presenciales de forma paulatina y voluntaria, difícilmente podremos enfrentar este desafío. En este párrafo se aprecia una rectificación del punto de vista planteado,  junto con una medida paliativa para resolver el problema de las clases online mediante el dialogo e información de las autoridades y establecimientos educacionales.

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