José Asunción Silva es sin duda alguna el nombre que se nos viene a la cabeza cuando queremos pensar en el modelo de poeta que queremos con el que se nos identifique en los demás países, reconocido localmente cuando Bogotá

José Asunción Silva

José Asunción Silva es sin duda alguna el nombre que se nos viene a la cabeza cuando queremos pensar en el modelo de poeta que queremos con el que se nos identifique en los demás países, reconocido localmente cuando Bogotá era todavía una ciudad en crecimiento como José “presunción” Silva por su comportamiento de dandi, esto debido a la vida que había visto en Europa e intentaba extrapolar a su mundo y su particular problema con el aseo de sus zapatos componen un personaje que no hacia parte de nuestra sociedad. Murió a la edad de 31 años, se especula sobre un suicidio, otros dicen coloquialmente que lo “suicidaron” su vida comprendió varios fracasos económicos una razón por la que se podría haber precipitado su muerte, al recitar sus poemas muchas veces lo hacía entre burlas y mofas, fue enterrado en tierra no santa bajo la especulación de suicidio, sin flores ni honores pese a suponer todo un cambio en la poesía colombiana.

Para entender como Silva fue capaz de producir una obra modernista de tal calibre estando encerrado en una Bogotá movida aun por los prejuicios sociales, el atraso económico, y el romanticismo tardío debo apuntar que él fue una persona superdotada y auto didacta, a los 3 años ya sabía leer y escribir y a los 10 ya había escrito su primer poema de mejor calibre que la mayoría de los poemas escritos por colombianos hasta esa época  (esto antes de ir a Europa y empaparse de los impresionistas) ya a los 20 años fue a Europa y supo aprovechar ese viaje para adquirir afinidades por ciencias como la filosofía, la pintura y el arte en general.

Silva estaba enamorado de su hermana Elvira, tanto así que la inmortalizo en su literatura en Nocturno una sinfonía en la noche, cuando falleció su hermana perdió parte de las pocas ganas que aún le quedaban por vivir.

Varios especialistas literarios dicen  Silva tiene una conexión con Rubén Darío en cuanto al ser modernistas comparten unas raíces románticas en común pero las tiñen con una prosa nueva, cubierta de matices entre los que resaltan los de valor artístico todo esto tomado por ambos de Bécquer, sin embargo también hay que mencionar que Silva conocía la poesía exotista y decorativa que también hace parte del modernismo, por lo que esto genera debate sobre cuál es la verdadera razón por la que su estilo y forma de escribir es del modo que es.

Los aportes más importantes a la poesía que produjo Silva pasan por la experimentación de la métrica convencional variando el ritmo, la rima y los acentos. Aunque también podemos ver poemas como los de Gotas amargas en los que juega completamente con el sentido del poema y la burla del mismo llegando a parecer un poemario escrito por un escritor completamente ajeno al mismo Silva.

Si bien los temas manejados por Silva podían ser considerados plenamente románticos: la muerte, los sueños, el amor no correspondido. Su manera de abordarlos e interpretarlos es modernista en la medida en que los trata con rechazo hacia la exclusión que se produce por las clases sociales con poder en un individualismo y no como haría un romántico llevando este individualismo plenamente a lo constructivo, el individualismo de Silva era propio de su personalidad debido a que era un marginado social por su intelectualidad y la cultura adquirida en sus viajes a Europa.

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