Justificando el capitalismo

Justificando el capitalismo

• Puntos a favor del capitalismo liberal (sin que el estado intervenga en la economía)

1. Reducción de los oligopolios.

Cuando el estado no interviene se hacen imposibles los monopolios y se reducen los oligopolios, esto produce que haya más productos para que los clientes logren escoger el de su preferencia así como existe más esfuerzo de las organizaciones en ser rentables gracias a la presión de la competencia.

2. Libertad de enriquecimiento y persecución de objetivos.

En el capitalismo liberal se tiene la oportunidad de explotar este lado “natural” y enriquecerse más que otros. Además, esto nos permite perseguir cualquier objetivo siempre y cuando se pueda empalmar con el comercio.

3. Bienestar

Con la llegada del capitalismo y el comercio a escala global, ahora se sabe cómo controlar el hambre y las guerras. Además, el capitalismo impulsó la ciencia y con ello, la medicina. En ninguna otra época hemos vivido más longevos que hoy.

• Puntos en contra del capitalismo liberal

1. Especulación y deuda.

Los bancos no prestan dinero que otros clientes depositen, sino que prestan dinero inexistente, por lo que llegará un momento en que los empresarios deudores no podrán devolver la deuda ni sus intereses, haciendo quebrar los bancos y con ello toda la economía. Sin un banco central que imprima nuevo dinero y use deuda pública para salvar a estos bancos, esto podría ser desastroso como las constantes crisis del siglo XIX e inicios del XX.

2. Relación tóxica con el estado.

Los empresarios y bancos privados saben de la necesidad de una nación con banco central sano para salvarlos de las inherentes crisis de este sistema de comercio. Pero aún así, en tiempos de crecimiento, algunos empresarios dicen que el estado es «parasitario», que con impuestos «frenan» la economía, es decir, en tiempos buenos el empresario y algunos ciudadanos comunes detestan el estado, pero cuando su irresponsabilidad choca con la realidad son ellos los primeros en pedir una fuerte intervención estatal. Provocando que los contribuyentes pequeños terminen financiando al estado y al apoyo que este le brinda a las grandes empresas y bancos.

3. Imperialismo y explotación.

Ya que la rentabilidad es el fin último para este sistema económico, se buscará reducir siempre los costos a un mínimo, sin ninguna excepción. Esto inevitablemente lleva a un nuevo tipo de esclavitud (explotación) y el saqueo a países pobres (imperalismo). Veamos por ejemplo lo qué pasa en el Congo y la RD del Congo, con niños muy mal pagados trabajando en minas, lo que eleva la rentabilidad en comparación a explotar recursos en países de primer mundo ya que la mano de obra es más elevada y existen mayores regulaciones.

• Puntos a favor del socialismo democrático

1. Abolición del comercio y sus efectos negativos.

Se busca un gobierno internacional que pueda poner fin al comercio para suplantarlo por un sistema de planificación económica descentralizada y democrática. Es importante que suceda a escala global, de otra manera no se puede eliminar el comercio. Por esto, será posible eliminar la irresponsabilidad bancaria, la corrupción sistemática, entre otros defectos de nuestra naturaleza comerciante.

2. Abolición de la obsolescencia programada.

Apple y todas las empresas se ven forzadas a hacer desde un inicio productos listos para descomponerse para que el consumidor tenga que volver a consumir. Si las empresas hicieran productos con el 100% de calidad sus ventas caerían en picada. Con el socialismo, al eliminar la rentabilidad, nos podemos dar el lujo de dejar de producir mercancías y empezar con la producción de valor 100% útil.

3. Abolición de la explotación.

Al producir no nos tendríamos que regir más por las leyes de la oferta, la demanda y, por ende, de la rentabilidad. Al trabajar todos en la producción de objetos útiles, no produciremos con el objetivo de sacar ganancias, sino de sacar bienestar.No tendríamos que mal pagar a nadie, el trabajo sería impulsado por nuestra propia naturaleza intrínseca de sentirnos realizados por lo que hacemos.

5. Ayuda mutua.

Actualmente, cada año millones de personas siguen muriendo de hambre y no hacemos algo al respecto porque no hay dinero detrás. En una economía socialista esto deja de importar. El mutualismo se acrecienta.

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