Justificativos

En la República Bolivariana de Venezuela está ocurriendo una transformación política, la cual es llamada una revolución que obedece a su trascendencia histórica y cultural y una deuda social con todos los habitantes de esta tierra pujante llena de oportunidades donde se debe sembrar la semilla de la igualdad, prosperidad y justicia. La búsqueda y profundización del cambio hacia caminos revolucionarios en el sentido de estrategias inéditas, no es exclusivamente un fenómeno de esta tierra si no de todas las poblaciones del continente latinoamericano. No reconocer la presencia de la revolución bolivariana es obviar un dato duro de la realidad; Que está ocurriendo más allá de si se ajusta o no a los paradigmas conocidos de revolución. Tanto es así que quienes no la comprenden parecen continuar aislados de su ocurrencia y al aislarse no tienen ninguna posibilidad de influir en ella para bien. Comprender su carácter y naturaleza es responsabilidad del liderazgo nacional. Descalificarla de forma emocional es sencillamente negar la primera responsabilidad de un líder. Ver el camino en medio de la confusión y el caos y luego ir solo a donde todos los demás necesitan que los lleven. Tomando en consideración el parafraseo anterior y en este orden de ideas, tratare, sin hacer alarde de un conocimiento profundo hacer una contribución muy puntual, acerca de la comprensión del concepto de propiedad privada en el pensamiento del economista-filosofo-historiador-sociólogo alemán Carlos Marx, el cual es uno de los temas de mayor impacto hoy por hoy en la población venezolana, y al mismo tiempo un tema tan temido y mítico entre empresarios y ciudadanos en general, pueda ser comprendido en su complejidad en la discusión nacional de manera responsable, al margen de las caretas demoniacas y pensamientos satanizados, a la que ha sido expuesto por los intereses involucrados en la lucha por el poder.

Comenzaré enfocando una interrogante, ¿qué diría Carlos Marx si le correspondiera hoy definir el rol de la propiedad privada en la construcción del socialismo bolivariano venezolano? Para tratar de responder abordare dos temáticas centrales: 1) Presentar el marco teórico que soporta la visión que tenia Carlos Marx sobre la propiedad privada, su visión originaria, y no la visión de los grupos intelectuales con la vehemencia de figurar en la pantalla de la historia que estudiaron a Marx. Para ello me apoyaré en sus tres obras cumbres, que no he podido analizarlas en su totalidad que son: la Contribución a Crítica de la Economía Política; El Capital y El Manifiesto Comunista; y 2) un reflejo de la realidad nacional para entender la visión de Marx sobre la propiedad privada y sus implicaciones en la construcción del socialismo venezolano.

Marx hace el enfoque siguiente. “Ninguna formación social desaparece antes de que se desarrollen todas las fuerzas productivas que caben dentro de ella, y jamás aparecen nuevas y más altas relaciones de producción, antes de que las condiciones materiales para su existencia hayan madurado en el seno de la propia sociedad antigua.”

A partir de este parágrafo se puede hacer las reflexiones siguientes: 1) El Socialismo del Siglo XXI tiene un sentido de dirección, tienen que madurar todavía las condiciones que no existen y que están por construirse en el presente; 2) El Socialismo del Siglo XXI lo piensan y lo inician hombres educados en el capitalismo y por esta razón habrá múltiples confusiones, contradicciones y obstáculos, tal como lo estamos experimentando en el presente; y 3) El Socialismo del Siglo XXI supone que se desarrollen las fuerzas productivas, crear transformaciones significativas en la formación socio-económica existente.

Marx plantea que tiene que ocurrir y madurar en el seno de la sociedad la democratización de la propiedad privada, nada más y nada menos. ¿Esta afirmación trae implicaciones como esta: 1) Marx nunca planteó la expropiación y satanización de la propiedad privada. Sólo esto se planteó en el mundo de los desinformados y de los intereses particulares posteriores a Marx, quienes por alguna razón omitieron la discusión franca y abierta de un tema de tal importancia para el futuro del socialismo responsable;

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