Karl Marx: El método de la economía política

Karl Marx: El método de la economía política

Es el análisis, un cierto número de relaciones generales abstractas determinantes, tales como la división del trabajo, el dinero, el valor, etc. Lo concreto es concreto porque es la síntesis de múltiples determinaciones, por lo tanto, unidad de lo diverso.
La sociedad burguesa es la más compleja y desarrollada organización histórica de la producción. Las categorías que expresan sus condiciones y la comprensión de su organización permiten al mismo tiempo comprender la organización y las relaciones de producción de todas las formas de sociedad pasadas, sobre cuyas ruinas y elementos ella fue edificada y cuyos vestigios, aún no superados, continúa arrastrando.

Karl Marx: El capital. Mercancía y dinero.

Mercancía es un objeto exterior, una cosa que merced a sus propiedades satisface necesidades humanas del tipo que fueran.
Valor de uso de la mercancía: La utilidad de una cosa, que está condicionada por las propiedades del cuerpo de la mercancía, y no existe al margen de ella. El valor de uso se efectiviza únicamente en el uso o en el consumo.
Valor de cambio de la mercancía: Se presenta como relación cuantitativa, proporción en que se intercambian valores de uso de una clase por valores de uso de otra clase, una relación que se modifica constantemente según el tiempo y el lugar. Este valor de cambio esta determinado por el tiempo socialmente necesario para producir la mercancía. Este tiempo es el requerido para producir un valor de uso cualquiera, en las condiciones normales de producción vigentes en una sociedad y con el grado social medio de destreza e intensidad de trabajo. Cada mercancía es considerada aquí, en general, como ejemplar medio de su clase. Por tanto, las mercancías que contienen cantidades iguales de trabajo o que se pueden producir en el mismo tiempo de trabajo, tienen la misma magnitud de valor.
El carácter fetichista de la mercancía: Una cosa, ni bien entra en escena como mercancía, se trasmuta en cosa sensorialmente suprasensible. Este carácter fetichista deriva de la forma misma de la mercancía. Lo misterioso de la forma mercantil consiste

en que la misma refleja ante los hombres el carácter social de su propio trabajo como caracteres objetivos inherentes a los productos del trabajo, como propiedades sociales naturales de dichas cosas y, por ende, en que también refleja la relación que media entre los productores y el trabajo global, como una relación social entre los objetos, existente al margen de los productores. Es por este “tomar a una cosa por otra” como los productos del trabajo se convierten en mercancías, en cosas sensorialmente suprasensibles o sociales.

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