LA CONQUISTA DEL AMERICANO: EL EUROPEO COMO UN HOMBRE SUPERIOR

LA CONQUISTA DEL AMERICANO: EL EUROPEO COMO UN HOMBRE SUPERIOR

Nombre del alumno:

Benjamín Andrés Subiabre Viano

Carrera:

Ingeniería Civil Industrial, Universidad Adolfo Ibáñez

Docente a cargo:

Verónica Ramírez

Fecha de Entrega:

Junio 5, 2017

El descubrimiento de América y su conquista es sin duda uno de los acontecimientos más importantes de nuestra historia. Este hecho histórico ocurrido durante el siglo XV, con la llegada de Cristóbal Colón en el año 1492 y posterior exploración, marca un hito en la humanidad: el encuentro entre el indio americano y el hombre del viejo continente. Para muchos, esto es un momento que destaca como progreso o incluso desarrollo de nuestra sociedad, engrandeciendo al europeo por el legado de muchas de sus costumbres que dejaron a los pueblos de América. Sin embargo, si bien se habla mucho de un hombre europeo intelectual, o por lo menos más intelectual que el indio, su forma de pensar, costumbres y estilo de vida nos hace pensar que es en realidad un hombre moralmente inferior al hombre americano. Lo anterior se puede observar en la obra Diálogos curiosos entre el autor y un salvaje de buen criterio que ha viajado por el baron de la Hontan, Louis Armand de Lom, donde el autor realiza una constante crítica al europeo por sus leyes e instituciones, por sus costumbres dentro de la sociedad y concepto de felicidad, por sus creencias y cómo el cristianismo ha llegado a predominar y manipular su estilo de vida. De este modo, es cuestionable el cómo el europeo que describimos anteriormente fue capaz de conquistar casi todo un continente, siendo considerado inferior al indio en muchos aspectos. Pero aun cuando este hombre puede ser considerado de esta forma, también logra plantear una estrategia donde busca que el indio vea al europeo como un igual o incluso como superior, así el indio no lo considera una amenaza y no podría poner gran resistencia frente a lo acontecido posteriormente. Es finalmente el europeo quien logra mostrarse como un igual frente a los indios y permitir que la conquista fuese más factible.

En primer lugar, el encuentro entre los indios y los europeos es un acontecimiento nuevo y desconocido para ambos grupos. Si bien la mayoría de las obras se basan en los registros de los europeos, también se puede atribuir características similares a los indios. De acuerdo con lo anterior, se observa que el indio se hace una imagen del europeo en base a lo que ellos quieren transmitir, tratando de representarse como unos iguales. Lo anterior se puede reflejar en la obra Diálogos de Louis Armand de Lom, en los aspectos visibles que el europeo deja ver como lo es la medicina:

Lahontan: Vengo, Adario, a tu cabaña para visitar a tu abuelo, que me han dicho que está en sus últimos momentos. Es de temer que ese buen anciano siga mucho tiempo más con la incomodidad de ese dolor que lo aqueja. Me parece que un hombre de setenta años como él, podría bien dejar de ir a la caza de las tórtolas. (...) Escucha, debes enviar uno de tus esclavos donde mi cirujano, que atiende bastante bien la medicina y estoy seguro que lo aliviará al momento (...)” (de Lom 81).

En la cita anterior, podemos observar que el europeo busca implementar sus costumbres en la cultura india, tratando a los otros como iguales, donde sus procedimientos médicos actuarían de la misma forma en sus cuerpos y “mejorarían” la vida del enfermo. Aquí, el europeo confía que sus procedimientos serían mejores por el desarrollo de la medicina en su continente, sin considerar que en América podrían existir métodos igual de efectivo o incluso mejores. De acuerdo con lo expuesto en el texto Nosotros y los otros de Tzvetan Todorov, refiriéndose al otro en el capítulo de lo exótico: “(...) Pero, el desconocimiento de los otros, la negativa a verlos tal como son (...) Es un cumplido muy ambigua el de elogiar al otro simplemente porque es distinto que yo” (Todorov 306). Dado lo anterior se puede enfocar el concepto de “exotización del otro” desde el indio hacia el europeo, valorizando a este hombre sin conocer realmente sus pretensiones con ellos, y además permite que también puedan aprender de sus costumbres. El hombre europeo logra ser visto como un ser humano desarrollado dado su apariencia, la cual era muy distinta a la del nativo americano. Más aún, el europeo es valorizado por ser distinto o desconocido para el indio, lo que le permite refugiarse en una imagen de superioridad frente al otro e incluso superior a éste.

Por otro lado, más allá de este encuentro, unos de los objetivos principales y a su vez el más difícil del europeo era comprender al indio en todos los aspectos como costumbres, creencias, estructura, sociedad, entre otros. Para lograr esto deben comenzar a compartir con estas personas de tal manera que se dé el espacio para que el europeo pueda transmitir costumbres, ya que para él esa es la forma correcta de vivir. En la obra Diálogos de Louis Armand de Lom, refiriéndose a la felicidad dice:

Lahontan: (...) Soy tu amigo, tú lo sabes, y por eso no tengo otro interés que el mostrarte la felicidad de los franceses, a fin de que tú vivas de acuerdo a sus costumbres como asimismo el resto de tu nación. (...) ¿Llamas tú ser feliz el estar obligado a albergarte en una miserable cabaña de cortezas, (...) ir vestido de pieles, hacer trescientas leguas a pie por los espesos bosques, abatidos e inaccesibles, (...)? (de Lom, 61 - 65).

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