Los Estadios De Piaget

LECTURA: ESTADIOS DEL DESARROLLO SEGÚN J. PIAGET

I. “El primer periodo”

Este llega hasta los 14 meses de edad y también conocido como sensorio-motriz anterior al lenguaje y al pensamiento. Es el punto de partida para adquirir nuevos modos de obrar, sensaciones, percepciones y movimientos propios del niño se organizan en el “esquema de acción”.

A partir de los 5 meses de edad se multiplican y diferencian los comportamientos del estadio anterior. Al coordinarse diferentes movimientos y percepciones se forman nuevos esquemas de mayor amplitud. Durante este periodo sensorio-motriz todo lo sentido y percibido se asimilara a la actividad infantil. Al finalizar el primer año será capaz de amaciones más complejas, como moverse para alcanzar un objeto, al igual que para mover dicho objeto a otra posición.

II. “Periodo preoperatorio”

Este llega hasta los 6 años de edad, en este periodo se da un gran progreso en el comportamiento del niño como en su pensamiento. Al cumplir los 18 meses el niño ya puede imitar algunos modelos con sus partes del cuerpo que no percibe directamente como son fruncir la frente o mover la boca. A medida que se desarrollan imitación y representación el niño puede realizar actos simbólicos.

La función simbólica tiene un gran desarrollo entre los 3 y 7 años por una parte se realiza actividades lúdicas en las que el niño toma conciencia del mundo aunque de una manera deformada, y reproduce en el juego situaciones que le impresionan. El lenguaje es fundamental para que el niño adquiera una progresiva interiorización mediante el uso de signos verbales, sociales y transmisibles oralmente. Frente a experiencias concretas el niño no puede prescindir de la intuición directa, debido a que sigue siendo incapaz de asociar los diversos aspectos de la realidad percibida o de integrar en un acto de pensamiento las sucesivas etapas del fenomenito observado.

III. “Periodo de las operaciones concretas”

Se da entre los 7 y 12 años de edad señala un gran avance en socialización y objetivación del pensamiento, aun teniendo que recurrir a su intuición el niño ya sabe lo que tienen sus efectos tanto en el plano del conocimiento como en el afectivo o moral esto atreves de un sistema de operaciones concretas. Las explicaciones de fenómenos físicos se hacen más objetivas, pero por más que ya se coordinen las acciones en un sistema de conjunto el pensamiento infantil avanza lento aun. El niño no es capaz de distinguir de forma satisfactoria lo probable de lo necesario.

Los niños también ya son capaces de una autentica colaboración en grupo, pasando la actividad individual aislada a ser una conducta de cooperación. La moral heterónoma infantil, unilateral da lugar a la autonomía del final de este periodo.

IV. “Periodo de las operaciones formales: la adolescencia”

La principal

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