Los Videojuegos Y La Agresividad En Los Niños

Durante varios años, los psiquiatras han buscado la respuesta a uno de los principales dilemas de los padres: ¿Puede un video juego crear un comportamiento violento en mi hijo? Los resultados varían en los experimentos realizados, pues todo depende del niño. Tal vez sea la edad, el grado de imaginación o la inteligencia. No todos los niños son afectados por video juegos.

Este tema tiene un parecido a las películas y la violencia. ¡NO ES LO MISMO! Ver una película violenta es solo visualización. Al jugar un videojuego violento nos convertimos en la persona que aprieta el gatillo. Repitiendo ese proceso varias veces, tenemos un simulador en nuestros hogares. También debemos tomar en cuenta que esto no ocurre en todas las edades. El cerebro de un niño no procesa información igual que un adulto o adolescente. El niño juega, le gusta lo que vio en el videojuego y luego lo imita.

Existen muchos informes de comportamiento agresivo que se muestran a partir de los videojuegos violentos. Aproximadamente el 85% de los niños, de entre 8 y 16 años, pasan alrededor de 13 horas a la semana jugando videojuegos. Después de varias semanas, un estudio muestra que estos niños están propensos a ser mucho más agresivos. Los niños de esta edad se sienten más atraídos a imitar lo que ven. En este caso, imitan lo que ven en los videojuegos violentos, lo que muestra un cambio en su comportamiento.

Los efectos a corto plazo de los videojuegos violentos son pensamientos agresivos. Los efectos a largo plazo son el aprendizaje de nuevas tácticas agresivas y actividades que pueden ser realizadas en la vida real. Estar expuestos constantemente a los videojuegos violentos puede llevar al conocimiento extensivo de una conducta agresiva y crear cambios en las interacciones sociales.

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