¿Mística, Resignación o ninguna de las anteriores?

¿Mística, Resignación o ninguna de las anteriores?

Sylvia Cortés Bello.

Profesora de Lenguaje.

Magíster en Ciencias de la Comunicación.

Para todos los tiempos, la Educación es un tema recurrente. Dentro de ese proceso somos actores impactados por los diferentes cambios sociales y políticos que indudablemente a la educación no la deja indiferente. Lo hacen los entendidos, los que por derecho propio se encuentran más comprometidos, como también los que de alguna manera estamos en este cuento. Sin embargo también lo hacen personas ajenas a ella, pero que por diversos motivos están conectados, ya sea como apoderados, como sostenedores o simplemente porque se meten en un terreno delicado que a veces pareciera ser que es tierra de nadie y a la vez de todos. Si volvemos sobre esto último, tenemos que reconocer que en educación deciden, abogados, ingenieros comerciales, civiles, industriales etc, los periodistas, por nombrar algunos y en el peor de los casos se le consulta también a un profesor. Pero aun cuando no seamos casi considerados para las grandes decisiones, (porque recordemos que los grandes filtros son los partidos políticos) seguimos siendo agentes importantes en este proceso.

Es pertinente recordar que los profesores hemos sido formados en diferentes centros de educación superior; llámese: Universidad de Chile, Pontificia universidad católica de chile, Universidades privadas; como alumno regular con clases presenciales, o simplemente una formación marmicoc. (qué hacerle, el sistema lo ha permitido).

De cualquier manera sea cual sea la escuela que hayamos tenido, algunos con un periodo más completo que otros, está claramente compartido este don idealista que nos hace soñar cada día junto a nuestros alumnos, que nos hace participar de un proceso importante, necesario, único.

Sin embargo es bueno preguntarse ¿qué hay de la mística del profesor? Estamos perdiendo interés en lo que hacemos?. Estamos desmotivados, sin duda, porque los alumnos de hoy difieren mucho de los de ayer; he escuchado hablar con añoranza de los tiempos gloriosos, cuando los alumnos no salían a recreo por estudiar. Esto ¿los hacía mejor que las generaciones de hoy? ¿Por qué vivimos recordando y añorando generaciones pasadas? Será que no estamos preparados para enfrentar las nuevas generaciones, las que han crecido con otros paradigmas sociales? Tienen acaso responsabilidad los jóvenes por estar insertos en un mundo mediático diferente al de antaño? Y visto desde el otro lado ¿Qué sucede en las unidades educativas, se está privilegiando más la forma que el fondo?

¿Qué es más importante en la educación hoy en día?. Escribir y volver a escribir lo que tengo que hacer o simplemente hacerlo? Leer, analizar, comentar, justificar, considerar reconsiderar, pensar, repensar, etc, con respecto a mi tarea como docente, son las acciones nefastas en la educación

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