Mascaras Mexicanas

<Mascaras mexicanas

Empezamos explicando que el libro nos va poco a poco guiando como es en realidad el mexicano dando a conocer que empieza todo con nuestra propia cultura lo explicare

Casi siempre el mexicano busca estar en la defensiva para no ser penetrados es por eso que el pueblo mexicano es inseguro, individualista callado tratando siempre de no sobresalir en el publico para que no lo critiquen ni sea insultado.

Nos explica al principio del texto que el mexicano viejo o adolescente, criollo o mestizo, general, obrero o licenciado, el mexicano se aparece como un ser que se encierra y se preserva no importando su clase social cuales son sus defensas con todos aquellos quien se quieran penetrar en su cuerpo: El silencio y la palabra, la cortesía, el desprecio, la ironía y la resignación

Lo siguiente que nos explica me pareció en lo personal muy fascinante Al mexicano es imposible verlo a los ojos es como si estuviéramos penetrando en su intimidad, se vuelve pequeño, se enoja, se tensa, se incomoda y empieza el conflicto con el simple de echo de verlo directamente. El porque me gusto tanto esta parte es porque es completamente cierto lo podemos vivir todos los días con la gente que nos rodea al instante que uno se le queda viendo a otra persona en la calle, pesero, escuela, discoteca etc. lo que siempre vamos a ganar es un insulto o que nos refleje su incomodidad y nos ganemos una mentada de madre o una agresión física.

No es que el mexicano sea valiente, sea guerrero intrépido etc. Al decir no me deje por ese imbécil se demuestra mas su miedo a la sociedad a no dejar que nadie entre a su vinculo impenetrable es por eso que la única forma que se puede entrar en el y podemos deducirlo nosotros mismos y se podría decir que es lo mas incoherente el “Alcohol”. Cuando un mexicano esta alcoholizado es para mi con lo que leído y lo que vivido es todo lo contrario deja que entren en su fortaleza. “SE ABRE”. SE siente seguro de contar sus sentimientos de socializar con los demás de tener confianza en sus amigos es ahí donde entra el miedo la desconfianza que la otra persona que te haz abierto te penetre sabiendo tus secretos tienes el temor que te tenga es ahí donde entra la típica expresión del “rajado”

¿Quien es el rajado?

Es la hombría del mexicano consiste en no "rajarse" nunca. Los que se "abren" son cobardes.

El mexicano puede doblarse, humillarse, "agacharse", pero no "rajarse", esto es, permitir que el mundo exterior penetre en su intimidad. En un pueblo machista la mujer es la que siempre sale perjudicada como ven los mexicanos a las mujeres y porque es tan peligroso no ser un “rajado”. Las mujeres son seres inferiores porque, al entregarse, se abren. Su inferioridad es constitucional y radica en su sexo, en su "rajada", herida que jamás cicatriza.

Opinión: Una parte muy desagradable es la anterior porque el mexicano no puede aceptar que la mujer este en su nivel por su rajada

El hermetismo es un recurso de nuestro recelo y desconfianza. Muestra que instintivamente consideramos peligroso al medio que nos rodea Ante la simpatía y la dulzura nuestra respuesta es la reserva, pues no sabemos si esos sentimientos son verdaderos o simulados Toda abertura de nuestro ser entraña una disminución de nuestra hombría.

Todas esas expresiones revelan que el mexicano considera la vida como lucha siempre ala defensiva repele toda clase de sentimiento contrario en cambio en otros pueblo no es así. La gente si se puede abrir sin que apuñalen por la espalda sin que se burlen de el

El "macho" es un ser hermético, encerrado en sí mismo, capaz de guardarse y guardar lo que se le confía. La hombría se mide por la invulnerabilidad ante las armas enemigas o ante los impactos del mundo exterior. El estoicismo es la más alta de nuestras virtudes guerreras y políticas. Nuestra historia está llena de frases y episodios que revelan la indiferencia de nuestros héroes ante el dolor o el peligro. Desde niños nos enseñan a sufrir con dignidad las derrotas, concepción que no carece de grandeza. Y si no todos somos estoicos e impasibles -como Juárez y Cuauhtémoc- al menos procuramos ser resignados, pacientes y sufridos. La resignación es una de nuestras virtudes populares. Más que el brillo de la victoria nos conmueve la entereza ante la adversidad.

Lo podemos ver que el mexicano siempre apoya al mas débil al que tiene menos recursos para ganar porque se siente como él inferior a los demás.

También vemos que significa la mujer para el mexicano la "mala mujer" casi siempre se presenta acompañada de la idea de actividad. A la inversa de la "abnegada madre", de la "novia que espera" y del ídolo hermético, seres estáticos, la "mala" va y viene, busca a los hombres, los abandona. Por un mecanismo análogo al descrito más arriba, su extrema movilidad la vuelve invulnerable. Actividad e impudicia se alían en ella y acaban por petrificar su alma. La "mala" es dura, impía, independiente, como el "macho". En esta parte el hombre no puede ni quiere que la mujer sea como el independiente él quiere que la mujer

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