Naturaleza Y Planificacion

NATURALEZA Y PLANIFICACION DE LAS ACTIVIDADES EN EL PARVULARIO (4A) PREESCOLAR

La distinción entre pedagogía activa pedagogía tradicional resulta tan esquemática

Y proporciona tan pocos elementos de análisis y comprensión como el parvulario. Es difícil conseguir que un niño de cuatro años, permanezca tranquilamente sentado durante algún tiempo mientras su maestra le explica. Algunos factores junto con la no obligatoriedad de la enseñanza preescolar, explican el hecho de que la mayor parte de las propuestas pedagógicas de naturaleza progresista y renovadora tengan tradicionalmente un impacto privilegiado en este nivel de la enseñanza.

La importancia de la actividad del alumno

es un postulado que aceptan, hoy en día, la casi totalidad de los educadores de párvulos. Asimismo, el material didáctico y fichas elaboradas por editoriales suelen estar construidas de una manera tal, que implican, en un momento u otro, la acción del niño.

Es obvio que muchos materiales que hoy encontramos en los parvularios tienen su origen en los de conocidos representantes de la Pedagogía Activa.

Claparede estableció entre actividad de efectuación y actividad funcional. Claparede propuso rechazar la expresión “educativa activa” y substituirla por “educación funcional”, que puede interpretarse en el sentido de una actividad necesariamente exteriorizada y observable. Para Claparede la actividad puede comportar o no comportar un movimiento externo del alumno: “la actividad de los alumnos no basta para calificar una escuela como activa”.

La palabra “activo” para muchos quiere decir que se mueve, que hace algo en lugar de limitarse únicamente a escuchar.

Se pretende que el niño sea activo, pero es indudable que no lo es de la misma manera. El análisis de la actividad del alumno nos conduce asi lógicamente ala análisis de la inter-actividad maestro/alumno.

No todas las decisiones del educador, ni todas las actuaciones del educador ni del alumno son igualmente determinantes del rumbo que va a tomar el desarrollo de una tarea concreta.

1): la primera dimensión a tener en cuenta es la finalidad educativa que se pretende alcanzar con la realización de la tarea. En el extremo opuesto nos encontramos con tareas cuya finalidad principal es potenciar la actividad del alumno en vista a desarrollar su autonomía, creatividad, capacidad de iniciativa, etc. Es posible potenciar la actividad de un niño para lograr la adquisición de un saber.

2. la segunda dimensión, se refiere a la existencia o no existencia de un saber especifico (conocimientos, norma, hábitos, destreza) alrededor del cual se organiza la totalidad de la tarea o incluso una serie de tareas sucesivas.

3. otra dimensión importante es la que concierne a la manera como el educador planifica, organiza y propone la tarea a realizar.

4. en lo que respecta al maestro,

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