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El 3 de noviembre del 2020 el huracán Eta entra a Centroamérica como categoría 5, impactando directamente la costa de Nicaragua, en fecha 4 de noviembre entra al territorio hondureño degradado como tormenta tropical dejando a su paso fuertes lluvias en las zonas oriente, centro y norte de Honduras, aumentando el riesgo de inundaciones y deslizamientos de tierra. Pese al aviso de parte de las autoridades hondureñas a través de los medios de comunicación, las autoridades fueron duramente cuestionadas debido a la tardía respuesta ante la amenaza que se presentaba y la negativa de cancelar la semana “morazanica” de feriado nacional, lo que ocasiono la respuesta tardía de parte de muchos pobladores ocasionando la pérdida de vidas humanas.

De acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) Las afectaciones reportadas oficialmente al 5 de noviembre incluyeron: 2 víctimas, 934 familias afectadas, 360,170 personas afectadas, 581 familias evacuadas, 2,776 personas evacuadas, 719 familias en albergues temporales, 3,539 personas en albergues y 200 personas rescatadas. El departamento de Cortés, fue duramente afectado, permaneciendo completamente incomunicado por varias. Posterior a dicho evento se la alerta es a nivel nacional de un nuevo fenómeno natural llamado Iota que azotaría al territorio hondureño como huracán categoría 5 (El proceso, 2020)

De acuerdo a La Coordinadora Latinoamericana y del Caribe de Pequeños Productores y Trabajadores de Comercio Justo (CL AC, 2020) El huracán Iota ingresó el lunes 16 de noviembre a la costa de Nicaragua con categoría 5. Es el huracán más fuerte en golpear Nicaragua desde que existen registros y además ocurrió apenas con dos semanas de diferencia de haber entrado el huracán ETA. Ambos huracanes siguieron una trayectoria de entrada a tierra similar, ingresando a Nicaragua y Honduras; países fuertemente golpeados por ambos fenómenos. Posteriormente, Iota continuó su trayectoria hacia El Salvador, en donde se disipó el miércoles 18 de noviembre, aunque las lluvias continuaron el jueves 19 de noviembre.

El departamento de Cortes, que fue duramente afectado, se han cerrado la mayoría de las dependencias sanitarias debido a los desperfectos, las lesiones del personal sanitario y el bloqueo de las carreteras. Los funcionarios gubernamentales advirtieron que la tormenta también está afectando considerablemente la seguridad alimentaria, los medios de subsistencia y la educación en toda la región y que las mujeres y las niñas se enfrentan a una amenaza adicional como es la violencia de género.

La ONU estima en 4,6 millones de personas las afectadas por la devastación que dejaron ambos huracanes Iota en Centroamérica. Se calculan millonarias pérdidas en el sector agrícola, ya que miles de hectáreas de cultivos de granos básicos, frutas, verduras y hortalizas, entre Honduras, Nicaragua, Guatemala quedaron inundadas por las

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