PARADIGMAS EN LA ENVOLUCION DE LA SOCIEDAD

Estudiantes: Hamilton Sánchez –20152142908, Fabián Gevara-20152139535

Mayra Alejandra Olaya; 20152142429, Rafael Pascuas 20151133648

PARADIGMAS EN LA ENVOLUCION DE LA SOCIEDAD

Los seres humanos a través de la historia se han caracterizado por seguir lineamientos y bases conocidas para resolver sus problemas y desenvolverse en su contexto, por esta razón resulta atemorizante el hecho de cambiar dichos lineamientos cuando resultan nuevas ideas para hacer las cosas, cambia la perspectiva y se genera cierta incertidumbre sobre el éxito o fracaso que conlleva realizar dichos cambios y en muchas ocasiones ideas que tienen gran potencial se ven opacadas por miedo al cambio.

Uno de los hechos históricos que ejemplifica mejor esta idea, es lo sucedido con Galileo Galilei en el siglo XVI, él defendía los argumentos de Copérnico sobre que la tierra gira alrededor del sol y no viceversa, mediante experimentos quiso demostrar esta teoría a las autoridades, pero al ser una idea revolucionaria y que contradecía a la obviedad, fue castigado por ello y obligado a retractarse, sin embargo, todos conocemos el final que tuvo dicha historia. Este tipo de ideas nos obligaba a replantear la forma en como analizamos las cosas, crea incertidumbre y temor al cambio, generando resistencia hacía nuevos pensamientos.

Estos cambios han estado envueltos en paradigmas, tema que permitirá desarrollar el presente documento, pero ¿Qué es un paradigma? Sí tomamos como base el video de J. Baker, los paradigmas son el conjunto de series y reglamentos que establecen límites, y explican cómo resolver problemas dentro de esos límites. Haciendo que las personas en muchos casos se cierren a los cambios y alternativas que no permiten ver más allá de lo que se establece, actuando como filtros que seleccionan datos, filtrando nuestras experiencias para no generar conflicto entre lo ya establecido, de manera que nos acomodamos a nuestras reglas.

Este comportamiento humano ha sido estudiado por muchos años, uno de los representantes más conocido es Thomas Kuhn, a quien se le atribuye el término de paradigma en su libro “La estructura de las revoluciones científicas”, en él, define “paradigmas” como:

“realizaciones científicas universalmente reconocidas que, durante cierto tiempo, proporcionan modelos de problemas y soluciones a una comunidad científica” (KUHN, 1969).

Uno de los beneficios de los paradigmas es que enfoca los recursos valiosos como tiempo y dinero en la solución de un problema dentro del paradigma, filtra las demás situaciones de la vida que no son importantes. Entonces, se tienen herramientas prácticas y validas por todos para hacer las cosas, existe colaboración y hay estabilidad en el ambiente.

Esto hasta un punto es viable, mientras que no aparezca la “parálisis paradigmática”, en la cual las ideas revolucionarias son amenazadoras, puesto que cambian el orden de las cosas, quienes poseían la mayor capacidad y poder deben empezar de nuevo, en un nuevo camino, ese miedo a lo desconocido hace que las revoluciones se estanquen o prosperen lentamente.

.Una de las razones que no nos permiten avanzar o prever el futuro de nuevas decisiones, es que tratamos de analizar el futuro con nuestros viejos paradigmas, una contradicción gigantesca, el tiempo nos ha demostrado que los paradigmas no aplican para una visión futurista, ejemplo de ello es la sorpresa que dio Japón con su tecnología, puesto que en épocas anteriores tenían mala fama por sus productos de mala calidad y a los precios más bajos del mercado, esto queda complementamente en la historia, ya que es uno de los mercados que mejor garantías y prestaciones ofrece actualmente y es uno de los países que están en la vanguardia en innovación tecnológica.

Otro ejemplo histórico muy significativo en la importancia de estar dispuestos a los cambios, lo podemos obtener del reloj electrónico, se descalificó el desarrollo de un reloj digital, puesto que la costumbre era un reloj de manecillas mecánico. Los japoneses tomaron la idea de los suizos y se dieron a la tarea de mejorarlo y dominando así de gran manera el uso del reloj electrónico que en la mayoría de casos no solo dan la hora, sino

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