PUBLICIDAD EN NIÑOS Y CONJUNTOS DE CONSIDERACIÓN DE MARCA BASADOS EN LA MEMORIA

PUBLICIDAD EN NIÑOS Y CONJUNTOS DE CONSIDERACIÓN DE MARCA BASADOS EN LA MEMORIA

La publicidad como factor de influencia se conceptualiza como la difusión y promoción masiva de productos y servicios, puede decirse que carece de contenido propio, debido que se limita a servir de vehículo económico y neoliberal. Desarrolla un importante papel de difusión y persuasión a través de la transmisión de mensajes que influyen sobre la audiencia, un público receptor, especialmente en niños, destruyendo o implantando valores y nuevas formas de comportamiento.

Si bien la realidad social va hacia la igualdad de sexos, la publicidad en la infancia esta encaminada a relacionar ciertos estímulos al mercado infantil. Por lo que parece, la publicidad se ha quedado enfrascado en una realidad antagónica, abusando de la natural credibilidad de un niño, todavía no maduro intelectualmente. Los niños no deberían ser objeto ni sujeto de publicidad y mucho menos convertirse en víctimas de una publicidad engañosa. Hay que tener en cuenta la enorme influencia que la publicidad y la televisión tienen en los niños y debería usarse como el potencial educativo que contiene.

EL artículo obvia aspectos importantes como los mensajes publicitarios que presentan roles sociales que acaban condicionando nuestra conducta. A menudo, la publicidad ejecuta una serie de estereotipos que tradicionalmente se han adjudicado al consumidor. La publicidad impone un ideal en cuanto a la imagen física, estilo de vida, propone llegar a la “felicidad” consumiendo los productos y servicios que difunde, lo que hace que todo aquel que se vea influenciado por la publicidad intente alcanzar el ideal alejándolo de su propia realidad.

En consecuencia el carácter positivista, propone según la lectura para el sector infantil un escenario dinámico, alegre y con un gran poder adquisitivo. Para incrementar la predisposición de compra en el niño utiliza varios temas: los estudios, las discrepancias con los padres, la música, la velocidad y el deporte, entre otros. Todos ellos son manipulados por los publicistas para crear al infante la necesidad de consumir, muchas veces innecesariamente. Es necesario que los padres sepan analizar estos trucos publicitarios para poder tener una actitud crítica hacia la publicidad.

Las técnicas de investigación en los diversos elementos comunicativos se centran en encuestas, observación participante por muestras de conveniencia y experimento de laboratorio de las muestras obtenidas.

Existen muchos anuncios publicitarios que tratan a los consumidores como tontos, que ofrecen un mensaje tan digerido, literal y resuelto, que no producirá ninguna actividad memorística en quien lo ve. Esto podrá funcionar para los programas de TV o las películas convencionales porque su finalidad es precisamente esa, un entretenimiento superfluo, pero una publicidad jamás debe contagiarse de esa lógica. La publicidad plana es una publicidad que saldrá de nuestra memoria tan rápido como entró. Una publicidad pensante es aquella que te plantea el mensaje de una manera tan interesante, que difícilmente el cerebro del consumidor lo pasará por alto, y creará la ansiada memoria que persistirá en el tiempo y será totalmente convencional.

Es obvio que cada esfuerzo publicitario tiene un objetivo limitado, que no es otro sino el de la promoción de marcas comerciales concretas; sin embargo esto

...