Pensamiento Libertario

Crónica vivencial.                                Pensamientos libertarios.         

Susana López Nandayapa

Hace tres años llegue a formar parte de la administración gubernamental. En un área de atención a la familia y a la niñez. Una que debería por definición preguntarse que pasa con la vida de miles de chiapanecos que viven una realidad invisible, una realidad de la cual el gobierno no tiene consciencia. La vida de comunidades que esconden muchas historias no entendidas, con pensamientos colectivos limitados, aferrados a una realidad que no cuestionan y que solo buscan explicarse en los programas y recursos que llegan del Gobierno.

El pensamiento individual y colectivo se ve aletargado, sumiso, perdido. No hay consciencia de su realidad, de sus sueños, de su libertad para sentipensar. Ya no hay hombres en esas colectividades que busquen romper este letargo de invisibilización. Los grandes hombres de pensamientos libertarios se han perdido, o son absorbidos por el sistema corrupto de las administraciones estatal o municipal o por el sistema de partidos políticos.

Veo todos los días desfilar a mujeres y niños buscando apoyos, desgarrados por el dolor, por la enfermedad, por el abandono. Buscan desesperados beneficiarse con algún apoyo del gobierno, muchas veces sin lograrlo. La visión del mundo de muchas comunidades en Chiapas se ha limitado a un entorno vacío. Ya no hay quien se cuestione esta realidad, como lo han hecho grandes pensadores que se atrevieron a preguntarse si la vida de su colectividad o su entorno debía ser así. Como Mujica que se atrevió a preguntarse; en que estamos gastando la vida, que la estamos cambiando por libertad. O como Gandhi que reflexiona sobre las diferencia de clases, la violencia como miedo a los ideales, sobre la dignificación del ser humano por encima de todo. O el propio Mandela que lucho por la libertad, por la unificación racial de su pueblo, por la paz universal.

Mi trabajo en la administración gubernamental me ha puesto a dudar si tendremos la capacidad de aplicar el conocimiento como cultura para implementar un sistema de pensamiento que genere acciones para cambiar el aquí y el ahora. El conocimiento como herramienta para cambiar la vida de la comunidad, para atreverse a nutrir sus deseos, sus sueños, de querer hacer las cosas, de potenciar sus capacidades para tener consciencia de su realidad y de su entorno.

Necesitamos lideres de pensamiento libertario, que se atreva a desafiar el status quo. Que se atreva a desafiar los propios miedos y limitaciones de las comunidades, de los hombres y mujeres, porque  todos estamos conectados y aún sin saberlo tenemos impacto dentro entramado social, somos parte de la articulación de las colectividades,  somos parte de una red de pensamiento colectivo, que debe cuestionarse, que se haga consciente, que se haga artífice de su propio destino.

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