Poderes del Estado

República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación

U.E. Instituto “Nueva Segovia’’

Barquisimeto – Edo. Lara

Poderes del Estado

                                              Integrantes:

                                                                           Alejandro D. Mosquera García

                                                               Docente: Ender Pirela

                                                         Materia: Soberanía

                                                                   Año y Sección: 4 Año “B”

Poderes del Estado

Desde tiempos antiguos se ha sembrado una preocupación de manera incisiva en el tejido institucional de la sociedad. Esta preocupación, la cual ha surgido de la mano del nacimiento de la democracia y el orden social ha sido consistente a través de la historia; ¿Cómo ha de ser organizado el Poder de un Estado?, empezando en los lideres de tribus indígenas, pasando por las asambleas de Atenas, hasta llegar a los sistemas de separación de poderes de hoy en día. La evolución de todos estos sistemas ha abarcado largos periodos de tiempo hasta llegar hoy a los distintos sistemas perfeccionados del Poder Estatal actual.

En la actualidad la organización de los Poderes ha avanzado hasta delimitarse mediante los Poderes Públicos, los cuales se definen a si mismos como los distintos poderes que posee el Estado en una República. El estado a través de estos ejerce los poderes legislativo (formular y modificar leyes), el poder judicial (hacer cumplir dichas leyes) y el poder ejecutivo (desarrollar políticas de gobierno) a través de diversas instituciones. Sin embargo estos Poderes Públicos pueden ser asociados a su vez a los organismos que mediante el acceso otorgado por el Estado a la violencia reprimen y obligan a la ciudadanía a acatar la ley, dichas instituciones siendo: La Policía, la Gendarmería y la Prefectura, junto a otros entes públicos.

        Esta noción se introdujo a las Ciencias Políticas, originalmente de la mano del filosofo Aristóteles, quien distinguió tres direcciones del poder del Estado: la que legisla, el soberano y el juez; a los cuales correspondía la deliberación, el mando y la justicia respectivamente y a las que correspondía a la organización política del momento. Esto implicando que cada poder que ejerce el Estado ha de poseer un titular distinto, para garantizar así el funcionamiento adecuado de cada poder de forma independiente.

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