Política Anti-Estado Propuesta De Martín Baró

Ensayo:

Política anti-Estado propuesta por Martín Baró

La propuesta de Martín Baró es una línea encaminada a una ciencia con conciencia; la propuesta de una “Psicología de la Liberación”, que es una respuesta a las grandes injusticias sociales de nuestro continente, ofrece hasta hoy una alternativa a quienes buscan articular producción y práctica profesional con compromiso y responsabilidad social.

Baró mencionaba que la psicología regional era la potenciación de las virtudes populares.

Él utilizaba una ética de la liberación que implica, como principio fundamental, contribuir a producir y reproducir la vida humana, en su corporeidad, en lo simbólico y pulsional, en sus características específicas y diversas, y en comunidad.

En este sentido, en sus argumentaciones críticas hacia una opción latinoamericana, existe una clara oposición a los Estados Unidos que manifiesta una postura política siempre presente en su obra, ya que pensaba que estos consideraban a Centroamérica su patio trasero. La postura política de Martín-Baró estaba claramente dirigida hacia una lucha contra el poder opresor.

A esta postura, que podemos llamar anti-Estado, la podemos encontrar en toda la obra de Martín-Baró. En su proyecto vital de liberación de la psicología, existe como uno de varios propósitos la ruptura de los lazos que históricamente han unido la psicología al Estado para ser utilizada como instrumento normalizador.

Martín Baró también nos habla del conocimiento que importamos de otros países los cuales queremos comparar con nuestra realidad, lo cual no es un hecho factible ya que no se puede ver la realidad desde los ojos de quien no la vive.

Afirmaba que el conocimiento debe ser un poder transformador y no un poder para someter a otros, que este debe ser una fuerza transformadora y no una fuerza opresora y es justamente en este tema expuesto por Baró en el cual centraré mi estudio en el presente ensayo.

Sin duda alguna se puede afirmar que los países a quienes llamamos desarrollados o primer mundistas (categorizaciones impuestas por ellos mismos) nos han visto como bien lo afirma Baró como su patio trasero, un lugar de donde pueden extraer riqueza dejando unos cuantos dólares de miseria y llevándose ellos la verdadera ganancia.

Sobre este tema el Pdte. Rafael Correa en su libro Ecuador: de Banana Republic a la No República (2009, p.144) cita a Chang (2002) el cual afirma lo siguiente:

“Una fundamental regularidad histórica es que los países que han llegado a la frontera tecnológica, y, en consecuencia, son imbatibles en cuanto a competitividad, ganan con el libre comercio y por ello tienden a impulsarlo”

Un problema fundamental que enfrentamos los países subdesarrollados es que somos ricos en materia prima pero no tenemos la tecnología para convertir a esta materia en productos que podamos exportar y de los cuales tengamos una mayor ganancia a causa del proceso que se lleva a cabo para obtenerlos, sino que hacemos lo opuesto vendemos nuestra materia prima e importamos los productos que de esta provienen, es decir lo que ganamos lo devolvemos.

Ernesto Che Guevara en una de las entrevistas a la cual él asistió afirmo lo siguiente:

"En los países subdesarrollados, donde impera el capitalismo, los ricos, que son pocos, se hacen cada vez más ricos, mientras lo pobres, que son la inmensa mayoría, se hacen cada vez más pobres.”

Era esta problemática la que Martín Baró rechazaba, ya que él tenía la convicción de que el poder debe ser una fuerza transformadora y no una fuerza opresora, pero a estos países “primer mundistas” no les conviene compartir sus conocimientos que les han llevado al desarrollo, sino que tratan de ocultarlos y llenan sus bocas con un discurso moralítico y cuando en la práctica se sabe que el poder lo han ido obteniendo mediante la opresión.

El Pdte. Rafael Correa en su libro Ecuador: de Banana Republic a la No República (2009, p.144) cita a Joseph Stiglitz (2002) el cual afirma lo siguiente: “Hagan lo que hicimos, no lo que predicamos”

Lo cierto es que tenemos una economía dependiente de estos países explotadores y esto se ha convertido en unas cadenas que muchas veces son atadas por los mismos estados gubernamentales a los cuales nosotros el pueblo los elegimos porque al inicio de su campaña nos ofrecen diversos métodos que involucran al progreso en sus diferentes ámbitos y al llegar al poder dan un giro de 90 grados a su discurso

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