RAICES DEL PRESENTE MULTIDIMENSIONAL

ANÁLISIS POLÍTICO Y ECONÓMICO INTERNACIONAL

TEMA ESPECÍFICO: “RAICES DEL PRESENTE MULTIDIMENSIONAL”

1. INTRODUCCIÓN

El efecto de globalización ha llevado a la conformación de un presente multimensional y fluido en donde se imbrican distintas dimensiones, como la económica, política y social con una tendencia marcada hacia sistemas políticos pluralistas que se identifican con la democracia, la economía de mercado y el predominio de la empresa privada. Este ensayo tratará de identificar las raíces que han generado el actual presente multidimensional enmarcándose en la dimensión política internacional. Para tal efecto, el análisis se remontará al pasado para explicar a grandes rasgos como la evolución de las distintas dimensiones han modelado el presente.

1. DESARROLLO

Con los tratados de paz de Osnabrück y Münster, firmados el 24 de octubre de 1648, en la región histórica de Westfalia, nace el concepto de Estado-Nación, que da origen al sistema político e internacional de nuestros días. Este se transformará en el punto de partida del análisis para tratar de identificar las raíces del presente multidimensional. En este escenario la concepción de Estado, permitió terminar con los conflictos religiosos y políticos, transformándose en la clave para el desarrollo de las dinámicas internacionales, el equilibrio del poder, la no intervención en los asuntos internos de los países soberanos, la inviolabilidad de las fronteras y la soberanía de los Estados. Henry Kissinger en su libro “El Orden Mundial” da a entender que la paz de Westfalia es el primer hito de la institucionalidad del orden mundial, permitiendo racionalizar el poder para lograr el equilibrio entre legitimidad, fuerza y restricción de la misma.

El orden mundial postwestfaliano se mantuvo por más de ciento cincuenta años, posteriormente en los acuerdos del Congreso de Viena de 1815, se definieron los lineamientos del sistema internacional hasta las guerras mundiales, dando paso al manto de la Guerra Fría con un sistema internacional polarizado que finaliza con la caída del muro de Berlín en 1991, dando cierta estabilidad al concierto mundial. Ante esta rápida revisión de la evolución del sistema internacional, queda en evidencia que los primeros dos sistemas, que se fundamentaron en los principios westfalianos, han sido los más duraderos y que los procesos posteriores cada vez han sido más frágiles bajo la mirada de los principios internacionales. Como se explica la inestabilidad en el ámbito político internacional en el último siglo, considerando que la evolución del principio westfaliano debiera tender a una consolidación del orden mundial. Henry Kissinger procura encontrar las falencias del sistema actual y detecta cuatro carencias elementales en el orden internacional del siglo XXI: el desmantelamiento del Estado-centrismo, la falta de armonía en las instituciones políticas y económicas internacionales, las estrategias de corto plazo y la ausencia de un hegemón benevolente. A criterio del suscrito, el desplazamiento del Estado como actor único y exclusivo del sistema internacional ha ido mermando el poder de los Estados en el concierto internacional, gracias a la incorporación de otros actores internacionales que gozan de una capacidad efectiva para generar y/o participar en relaciones internacionales, como son las ONG, empresas multinacionales, crimen organizado internacional, etc. Estás organizaciones forman parte de un presente multidimensional mucho más complejo, que podrían explicar en cierta forma las debilidades del sistema internacional del último siglo. Sin duda, a este debilitamiento se suma la arista del mundo islámico que ha mostrado cierta incapacidad para absorber los principios comunes de legitimidad internacional, rechazando aceptar a los Estados no musulmanes como sujetos de soberanía plena. Por otro lado China bajo el principio fundamental del confucianismo, se proyecta como una potencia central, a la que los demás sujetos están en una posición subordinada. Por último Rusia mantiene un papel preponderante en el concierto internacional al ser parte del consejo de seguridad de Naciones Unidas, ostentando un poder que no va necesariamente en la dirección del sistema Westfaliano.

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