Resumen "PORCOFILIA Y PORCOFOBIA"

PORCOFILIA Y PORCOFOBIA

Tema del texto

El tema de este artículo es la práctica alimenticia centrada en el cerdo como animal repudiado por unos pueblos y amado por otros, y cómo esta práctica nos lleva a la reflexión del origen de la guerra como medio de control demográfico y territorial.

Resumen del texto

A día de hoy, el cerdo sigue sufriendo un profundo rechazo por parte de los pueblos judío y mahometano. Mientras que, otros pueblos, como los habitantes de Nueva Guinea y de las islas Melanesias del Sur del Pacífico, los necesitan, puesto que los cerdos son el pilar fundamental de su civilización.

Al principio, los estudiosos admitían que la condena bíblica y coránica de los cerdos se fundamentaba en base a que estos animales eran sucios, pero luego se derivó al concepto de triquinosis, enfermedad producida por comer carne de cerdo poco cocida. Así pues, se consideraba a este animal, como un vector de enfermedades humanas. Pero, el ganado vacuno, cabras, ovejas, caballos también son portadoras de enfermedades aún más graves, como la brucelosis o el ántrax.

Otros sugieren que la gracia de estos tabúes dietéticos estaba en aceptar lo que Yahvé decía sin darle más vueltas.

Finalmente, la última teoría más aceptada es la de que la cría de cerdos constituía una amenaza para la integridad de los ecosistemas naturales y culturales del Oriente Medio.

La razón básica de esto radica en que el pueblo israelí era eminentemente nómada, centrado en el pastoreo de ganado vacuno, ovejas y cabras, puesto que las zonas que habitaban eran áridas, y el cerdo es una criatura de bosques y riberas umbrosas de los ríos. Como ser omnívoro que es, se manifiesta como competidor directo del hombre y no puede subsistir sólo a base de hierba, y en ningún lugar del mundo los pastores nómadas crían cerdos en cantidades importantes. También, es difícil conducirles a largas distancias. Pero, si hay una razón aún más importante que estas, es que el cerdo está mal adaptado desde el punto de vista termodinámico al clima caluroso de esas zonas del Néguer y el Valle del Jordán, ya que, su piel no transpira y necesita humedecer su piel en el exterior para compensarlo.

Un hecho histórico curioso es que las ovejas y cabras fueron los primeros animales domesticados en Oriente Medio, sin embargo, los cerdos no lo fueron en la misma región hasta 2.000 años más tarde. Luego, esos tabúes, surgieron en torno a la idea de que la carne de cerdo para los pueblos del Oriente Medio constituía un artículo de lujo, y se formuló una prohibición en torno a su ingesta.

Por otra parte, el amor a los cerdos es un hecho significativo entre los maring, un remoto grupo tribal que habita en la Cordillera Bismarck de Nueva Guinea.

Cada subgrupo local de los maring celebra un festival de cerdos una vez cada doce años.

El sacrificio masivo final que tiene lugar, dura alrededor de un año y se conoce como un kaiko en el lenguaje de los maring. En los primeros dos o tres meses que siguen a la terminación del kaiko, cada clan entabla un combate armado con los clanes enemigos.

El resto de cerdos se sacrifica durante el combate; vencedores y vencidos pronto se encuentran totalmente privados de cerdos adultos con los que ganarse el favor de sus respectivos antepasados. El combate cesa y los beligerantes acuden a los lugares sagrados a plantar árboles pequeños llamados rumbim. Las hostilidades no se reanudarán hasta que el rumbimk permanezca plantado.

Cada parte de este ciclo se integra en un ecosistema complejo autorregulado que ajusta con eficacia el tamaño y distribución de la población animal y humana según los recursos disponibles y las oportunidades de producción.

Resulta curioso que la tarea de criar cerdos así como la de cultivar ñame, taro y batatas depende principalmente del trabajo de las mujeres maring.

En un sentido ecológico, el número de cerdos excedentes en un grupo indica su fuerza productiva y militar, dicho de otro modo, desde el punto de vista de la

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