SALUD.

SALUD

El gasto en salud es aproximadamente 5.6% del PIB. Ahí se incluye el gasto público (el cual representa 46% del total), el prepago privado (2% del total) y el gasto de bolsillo (52% del total). Este último es muy alto e inequitativo debido en parte a que más de 50% de la población no tiene ningún tipo de seguro médico, lo que a su vez ocasiona que un gran número de familias incurra en gastos catastróficos en salud, es decir que desembolsen en este rubro 30% o más de su ingreso disponible.

La seguridad social se obtiene principalmente a través de la fuente de trabajo. Los empleados del sector privado formal y sus familias están amparados por el IMSS, lo que significa 32 % de la población nacional. Los trabajadores del gobierno federal y sus familias están bajo el régimen del ISSSTE; de esa manera se favorece a 6% de los mexicanos. Hay otros servicios de salud dirigidos al personal de Pemex, de la Secretaría de la Defensa Nacional, de la Secretaría de Marin a y de los gobiernos estatales; así se protege a otrotanto de mexicanos (2%).

IMSS

El seguro de enfermedades y maternidad del IMSS está financiado por las contribuciones de los trabaj a d o res, los patrones y el gobierno federal. Éste aporta un monto fijo e igual por cada asegurado titular, lo que corresponde a 13.9% de un salario mínimo del Distrito Federal. La suma total de las aportaciones depende del número de asegurados ti tulares cubiertos por el IMSS. Cuando el total de las aportaciones del gobierno federal se divide entre el número de derechohabientes del IMSS, el gasto percápita anual es de 821 pesos a escala nacional; en los estados variará en función del número de asegurados titulares. Si al gasto en servicios de salud se le agrega el gasto en recursos públicos (es decir, las actividades de salud pública y regulación que realiza la SSA), se obtiene el gasto fiscal, el cual corresponde a 961 pesos por persona amparada por el IMSS. La aportación de las cuotas obrero - patronale s depende del número de salarios mínimos que percibe el trabajador. El gasto fiscal más la cuota obrero - patronal forman el gasto público; 2 606 pesos por de rechohabiente del I M S S.

Los recursos para financiar al ISSSTE están compuestos por las aportaciones obreras –a impuestos a la nómina–, las aportaciones patronales –contribuciones del gobierno–, y el déficit entre ingreso y gasto, el cual se paga con recursos fiscales. La suma de las aportaciones del gobierno como patrón y del déficit es de 1 611 pesos por derechohabiente (los trabajadores y sus familias). Cuando se incluye el gasto en bienes públicos, los afiliados a esta institución reciben, cada uno, 1 751 pesos en recursos fiscales. Si se agregan las cuotas que aportan los trabajadores, las personas amparadas por el ISSSTE reciben 2 322 en recursos públicos per cápita dividió entre la población derechohabiente de ambas instituciones; así se obtuvo

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