Taller problemas sociales

ENSAYO

Para darle un buen inicio al siguiente ensayo, debemos tener conocimiento que los problemas sociales no son el producto tan sólo de condiciones objetivas en la sociedad, sino que son el fruto de un proceso de definición colectiva de ciertas condiciones como problemas (Blúmer 1971).

Con el fin de consolidar un enfoque comparativo y poder verificar empíricamente sus hipótesis, a mediados del siglo XX, la ciencia política se propuso clasificar las sociedades de acuerdo con sus sistemas políticos. Los objetivos de estas clasificaciones eran la complejidad, por lo que su propósito ya no era hacer un vasto inventario jerárquico de las similitudes y divergencias comprobables de un sistema político a otro, sino revelar ese inventario en el motor de una explicación de los procesos sociales.

Estas áreas tienen una limitación en la cantidad de problemas que pueden enfrentar, por lo tanto, existe un mercado para los problemas sociales, en el que solo algunos de los problemas potenciales pueden constituirse como tales. Las condiciones sociales que los diferentes grupos pueden considerar perjudiciales son innumerables, sin embargo, solo una pequeña parte de ellas se convierten en problemas importantes, que dominan el discurso social y político durante ciertos períodos.

Este espíritu de la ciencia política para explicar los procesos sociopolíticos facilitó su encuentro e intercambio con las ciencias sociales, especialmente con la sociología, la antropología y la psicología social, de hecho muchas investigaciones llevadas a cabo en los años cuarenta y cincuenta sobre el apoyo masivo a los regímenes fascistas se basaron en la teoría piscicultura y aunque pronto se consideró obsoleta, derivan del desarrollo de dos de las líneas teóricas más importantes para la ciencia política en A mediados del siglo XX, estudios de liderazgo y cultura política.

Cada una de las esferas sociales tiene sus propias características organizativas y culturales que influirán en la selección de problemas a los que se prestará atención. Varios estudios muestran cómo, por ejemplo, las rutinas productivas de los medios influyen en cómo se crean las noticias, así como en la cantidad de tiempo.

Otro punto, básicamente importante es el asunto de muertes por accidentes automovilísticos, por ejemplo, solo en los últimos años comenzó a definirse como un problema social en nuestro país, no importa cómo condición objetiva existió mucho antes, las diferentes fundaciones, legisladores, funcionarios o las personas afectadas por accidentes buscan crear conciencia a los ciudadanos y movilizar al gobierno para proporcionar soluciones.

En uno de los estudios más detallados sobre la construcción de un problema social, Gusfield muestra cómo, en los Estados Unidos, la responsabilidad principal de los accidentes se ha atribuido al "conductor ebrio". Si se consideraran otros tipos de información disponibles sobre accidentes de la edad alternativa del conductor óptico, su inexperiencia, si tenía sueño o había usado drogas, podría haber alcanzado una atribución diferente de responsabilidad. Según Gusfield, sin embargo, la explicación del "conductor ebrio" tiene una fuerte carga simbólica y dramática que resuena con el individualismo y el puritanismo estadounidenses, ya que culpa a las personas que no podrían controlar su vida y excusar los factores estructurales que podrían intervenir.

Los medios de comunicación están constituidos en el área más importante para la construcción de problemas, ya que es a través de ellos que se presentan ciertas condiciones como problemas, y se proporciona una determinada definición o interpretación de los mismos. El acceso a los medios es especialmente importante para los demandantes que son extranjeros, es decir, pertenecen a grupos de presión tradicionales y no tienen acceso por sí mismos a legisladores o funcionarios.

Al presentar los problemas en los medios de comunicación, intentan obtener el apoyo del público que les permita influir posteriormente en otras áreas, especialmente en las gubernamentales, para lograr acciones que favorezcan o apoyen su interpretación del problema. Los medios de comunicación, además, debido a su constante necesidad de temas innovadores y dramáticos que puedan transformarse en noticias, son más receptivos que los legisladores o los funcionarios a las afirmaciones hechas por personas externas.

Otro punto para abordar es, cuando los medios se convierten en áreas de transmisión de quejas, las convenciones de los diferentes géneros de la cultura popular también afectan el tratamiento de los problemas sociales. Una película o un libro superventas que muestra a una familia afectada por la necesidad de un trasplante de órgano, por ejemplo, puede hacer más para presentar y establecer una cierta imagen del problema que los expertos que aparecen entrevistados en la televisión. El tratamiento del tema probablemente debería ser simple, dramático y estereotípico para cumplir con los requisitos de estos géneros, pero dejará una impresión notable en su audiencia.

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