Trabajo de historia económica

1) Explique, defina con sus propias palabras el pensamiento (económico) Greco-Romano.

        La economía, como muchas otras disciplinas del conocimiento no tuvo por mucho tiempo independencia propia en el campo teórico y se reducía a un conjunto de normas surgidas fundamentalmente de la experiencia cotidiana. De allí, que los hechos y las doctrinas económicas deban estudiarse dentro de su contexto histórico y en función de quienes desarrollaron las ideas que generaron sus pensamientos; ya que, las mismas se corresponden a la época que se concibieron, algunas han logrado trascender en el tiempo, otras han sido objeto de fuertes críticas.

        En el caso de las ideas griegas, algunos autores señalan que la misma fue producto de la fusión entre la economía y la filosofía política, en donde los factores sociales y económicos se correspondían con la ética y a la política. Algunos de los representantes del periodo del pensamiento económico griego son: Hesíodo, Jenofonte, Platón y Aristóteles. Por su parte, en los romanos destacan: Justiniano, Triboniano, Teófilo y Doroteo (juristas) y Cantón, Varrón, Columela, Plinio y Frontino (agrónomos).

        Entre los factores que más destacan para estos teóricos griegos son la importancia que se le daba al trabajo para incrementar la riqueza, además del orden y la justicia para garantizar la prosperidad.

        Platón, era partidario del control de precios, de la calidad de las mercancías y del comercio exterior. Defendía el dinero fiduciario y era contrario al uso del oro y la plata en los intercambios interiores. Por su parte, Aristóteles despliega en la ética la distinción entre el principio de equivalencia y la justicia distributiva. Del mismo modo, realiza una diferencia entre valor de uso y valor de cambio, dependiendo este último de la utilidad, la escasez y los costes. Así mismo, en materia monetaria reconocía las funciones del dinero como medio de cambio y depósito de valor. No obstante, es contrario al cobro de interés; ya que, la tradición religiosa, en general, condenaba la usura.

        En cuanto a  la corriente judía, también condenaba la usura y distinguían entre beneficio legítimo e ilegítimo y, es muy severo con respecto al cobro de intereses; por lo que, dieron lugar a otros métodos para el cobro de los mismos a través de mecanismos evasivos o ficciones legales. Por su parte, la tradición cristiana, también condenaba la usura por ser un pecado contra la caridad.

        En relación al pensamiento romano, era contrario al griego porque sus ideas eran más de carácter pragmático y no analítico. En este sentido, se distinguen dos grupos de autores: los agrónomos y los juristas, siendo los aportes de estos últimos la que se considera más sistemática y significativa para el pensamiento económico. Así mismo, hay que destacar la clasificación de los contratos a través del Código de Justiniano, en donde se distinguía entre un préstamo gratuito de aquel al que se lo cobraba un interés.

        Los romanos eran agricultores, principalmente, productores de cereales e introdujeron importantes aportes en materia agrícola. No obstante, sus principales aportes fueron el derecho y las concepciones de organización política y social que han perdurado en occidente por siglos y que sirvieron de cimiento para la construcción del pensamiento económico.

2) Explique, defina con sus propias palabras el pensamiento (económico) escolástico.

        La economía medieval estuvo supeditada a las normas morales de la religión. Durante esta etapa floreció algún intercambio, pero las condiciones de la vida, y las actitudes críticas y limitantes de los oficiales públicos de aquella época mantuvieron el comercio en constante inspección.

        Este periodo se desarrolló bajo la influencia de las enseñanzas cristianas, la opinión de los líderes de la sociedad medieval (el cobro de un interés por el uso de un préstamo). Algunos de sus principales representantes fueron: San Alberto Magno, San Tomás de Aquino, Enrique de Frimaria y Juan de Buridan.

        Los teólogos y los filósofos escolásticos entendían los fenómenos económicos desde el punto de vista moral. Por lo que, no se planteaban cómo funcionaba el sistema económico, sino les preocupaba si un acto era lícito o ilícito; justo o injusto. De allí, que centraran su atención en la teoría del justo precio y en los problemas de la usura. En general, explicaban que el valor de los bienes se determinaba teniendo en cuenta la oferta y la demanda.

        San Alberto Magno, avanzó en la teoría del valor, pero mostraba cierta ambigüedad en la misma, al aceptar la estimación del mercado en el momento que se produce la venta, y sin embargo no parece arriesgado afirmar que contemplaba tanto el coste de producción como la utilidad del bien.

        Tomás de Aquino, realizó aportes importantes al pensamiento escolástico, al tratar de conciliar la razón y la fe. En este sentido, la doctrina económica que desarrolló trataba sobre cuestiones como la propiedad privada, el precio justo y la prohibición de la usura. Por lo que, escribió que vender una cosa por más de su valor, o comprarlo, por menos de lo que vale, era injusto e ilegal. De esta forma, los empresarios estaban limitados en su actividad para competir. El sistema aseguraba que los productos tuvieran un mismo estándar de calidad y que se vendieran a un precio justo. La equidad, no la eficiencia dominó al pensamiento económico medieval.

        En relación con Escoto, su teoría del valor contemplaba la utilidad, defendía que el precio debía cubrir todos los costes de producción, incluido el beneficio del mercader y una compensación por el riesgo. Por su parte, Siena expuso las tres fuentes de valor: la escasez, la utilidad y la deseabilidad

        Los escolásticos en relación al problema del justo precio, exponen dos formas para determinarlo: 1) Espontáneamente a través del mercado, de modo que con el tiempo este precio será el precio natural, y 2) mediante la regulación pública o precio legal. En ausencia de una regulación, el precio de mercado se presupone justo.

        Respecto al monopolio, lo condenaron unánimemente al considerarlo como una conspiración para alterar los precios. En cuanto al tema de los salarios, aplican la teoría del justo precio al precio del trabajo, que debía permitir la manutención del trabajador y su familia en su nivel social. Con respecto a los derechos de propiedad tenían una teoría consecuencialista, es decir, los beneficios derivados de la propiedad superan los costes de su no existencia. En relación a la teoría monetaria, fueron muy  pocos sus progresos y seguía en vigor el metalismo aristotélico.

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