UNA MIRADA CRÍTICA AL SOCIALISMO

UNA MIRADA CRÍTICA AL SOCIALISMO

La Revolución Industrial que tuvo lugar en Gran Bretaña en la segunda mitad del siglo XVIII fue un periodo de transformación y desarrollo social, económico y tecnológico que permitió la transición de una economía rural basada en la agricultura y el comercio, a una economía urbana fundamentada en la industria. 1, 2 El crecimiento industrial no regulado afectó dramáticamente la vida de la clase trabajadora repercutiendo en condiciones deplorables de trabajo, además del desplazamiento y alienamiento del trabajador provocado por la era de la maquinaria. 3 No obstante, algunos pensadores de la época consideraban que los males de la industrialización evitables, dando lugar al surgimiento del socialismo como ideología política. 3 Este pedía el desarrollo de nuevas estructuras económicas basadas en un conjunto completamente diferente de ideologías morales, generándose inicialmente el socialismo utópico y posteriormente el socialismo científico. 3

El socialismo utópico data de las décadas de 1830 a 1840 y sus principales representantes fueron Charles Fourier y Saint-Simon en Francia y Robert Owen en Gran Bretaña. 3, 4 Esta corriente de pensamiento consideraba una reforma al capitalismo que permitiera su transición al socialismo. Se basaban en la cooperación, la felicidad y el bienestar de todos como objetivo final; no enfatizando la “política” por sí misma, sino en la producción y distribución de la riqueza. No obstante, no consolidaron sus teorías en un modelo dificultando la consecución de sus planes sociales. 3 

El movimiento socialista moderno surge en 1848 con la publicación del Manifiesto Comunista por Karl Marx y Friedrich Engels. Esta ideología rompió con el socialismo utópico pues tenía en cuenta la realidad política y económica de las sociedades presentes y pasadas. Para el socialismo científico, el capitalismo estaba destinado a colapsar en su intención de superar las crisis económicas causadas por el desarrollo de las fuerzas productivas mas allá de lo que permite el sistema, 3 conduciendo al proletariado a rebelarse a través de su propia miseria creciente. Así, una vez arrebatado el poder político a la clase media, el proletariado podrá establecer su propia hegemonía que con el tiempo madurará en una sociedad sin clases y sin Estado, dando lugar al comunismo. 3

Teniendo en cuenta lo anterior, la transición del capitalismo al socialismo podría no generarse de forma brusca, si no a través de un proceso de reformas económicas, teniendo en cuenta las fuerzas que ejerce el mercado y considerando al Estado como un instrumento clave para la administración de recursos, mas no como gobernante. Sin embargo, pensar en el socialismo como un sistema económico que rija la sociedad es en esencia utópico, idealista pues, de acuerdo a Maquiavelo, el hombre es por naturaleza egoísta y el sistema económico actual tan solo evoca dicha naturaleza.

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