Entrevista a un Rey Feo - Universidad de San Carlos de Guatemala

Guatemala 24 de marzo del 2018

Entrevista al Rey Feo Pedro Culán 1990

“Esculpen, esculpen, señores, la presentación es mía, yo soy Pedro Culán, en los Yiunaits, Peter Culey; en Francia, Pier le´Cule; en Italia, Pietro Culini; en Europa del Este, Petrof Kulicof; en el Oriente Medio, Osama Pin Plata.”

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Rey feo, parte del Honorable comité de Huelga por más de 5 años, parte del Consejo superior y muchos logros más… Señores, él es Pedro Culán, ex estudiante de la Facultad de económicas, pero siempre un fiel huelguero a favor de ser la voz de los que no tienen.

Un día después de la Huelga de dolores, tuve la oportunidad de tener una entrevista muy interesante con este personaje. Fue muy amable y agradable, cada que conozco a otro san carlista, me doy cuenta de la verdadera esencia de la universidad, no es robar, no es mentir, no es ser delincuentes, no es apoyar la violencia, si no ir en pro del cambio para una mejor Guatemala.

Luego de una plática introductoria comenzó la entrevista que fue dándose como una charla normal, pero muy interesante.

–¿Cómo llegó a ser Rey feo de su Facultad?

–Quedé por casualidad. Uno de los chicos de teatro me dijo: “Vos, ¿por qué no te metes? Soy solo uno y no quiero ganar siendo el único”. –Pero en ese entonces yo ya hacía el monologo de Pedro Culán–. Esta bueno, le dije yo.

Convenció al Chisguete, otro compañero, él se disfrazó de Fray Sida, ya que en ese entonces era muy popular lo del Sida, y bueno dijimos, ya éramos tres. La idea era que El sobrino ganaba, pero él pierde y los que nos vamos a segunda vuelta somos los otros dos y ahí comienza mi carrera de rey feo.

–Entonces, usted ni tenía tantas ganas de participar.

–Así empecé yo, ni sabía que era el Rey feato. A mí lo que me gustaba era el teatro. Ese día gano en huelga y al siguiente tenía que ir a declaratoria, fui y todos se decepcionaron de mi actuación, cuando bajé les dije: “Muchá, si yo no sé cómo es ser rey feo”. A lo que ellos contestaron: “Pues anda a ver quién te ayuda porque tenés que ir competir por el general”. Entonces decido irme con los del teatro a pedirles ayuda. Una caja de octavos y Q100 es lo que me dan, y me fui al paraninfo, ellos ayudaron a hacer el discurso y a introducirme a esto.

–¡Que interesante! ¿Ganó ese mismo año?

–No, ese año llegue a finales, pero ganó Chichicaste Picón, y a la final vamos Maquiavelo y yo también. Justamente ese año, desaparecen a toda la directiva de la AEU.

–Ah, se refiere a los 12 estudiantes que fueron desaparecidos… Hay un mural en mérito a ellos, ¿verdad? En ciencias políticas si no estoy mal…

–Así es, en ese entonces era bien feo. Había un listado de 40 personas que tenían que irse o iban a matarlos, entre esos estaba yo. Teníamos 48 horas… Una vez estaba hablando en la plaza Oliverio Castañeda y entre chiste y broma les dije: “Miran muchá, en ese listado que dieron, yo no sé por qué estoy ahí, si yo sólo cuento babosadas”. Yo de verdad lo estaba diciendo y las personas se reían, y no, les dije: “Es en serio, yo ni tengo a dónde ir”. Diciéndolo yo y mataron al encargado de la editorial. Ahí si todos vimos que era en serio.

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